"Al comprender que estaba perdido, no se asustó, más bien sintió un entusiasmo extraño, provocado por la posibilidad de caminar sin toparse con nadie ni con nada conocido; sintió por primera vez la libertad de ser anónimo, de poder hacer lo que quisiera sin que nadie fuera a comentar ni a criticar, ni a relacionar sus actos con su nombre y familia." (Pág.105).
|