Frío

Wintergirls - Reseña (https://thebookslayers.home.blog/2021...)

Lo primero es mandar un besito a Ali que me recomendó este libro hace 5525474 años. Libro que me recomienda, libro que me gusta. Chef kiss el gusto de mi chavala.

Como siempre digo en estos casos, este libro no es para todes. Así que si sufrís problemas alimenticios alejaos de la historia. Y esto no es ningún spoiler.

El caso es que he leído algunas malas reseñas porque no llegaban a empatizar con la protagonista. Pero yo creo que no hay forma de empatizar o verse reflejada en Lia, a no ser que hayas pasado por esta enfermedad o algo parecido.

No puedes pretender entender a Lia porque no está sana, su cerebro no funciona correctamente, es imposible saber por qué hace las cosas. O sea, el libro trata de eso, de que lleguemos a comprender la mente de estas personas pero claro, sus pensamientos no tienen ningún tipo de sentido.

Pero como siempre tengo que recalcar que son libros muy necesarios para gente adolescente, porque vemos la lucha continua en su cerebro porque tiene hambre pero le pesa más el estar delgada y esas cosas que en verdad son gravísimas.

Evidentemente no es la chica más cariñosa del mundo, ni la más amable. Ella siente que todos los que están a su alrededor quieren hacerla daño y creo que todes hemos tenido, o hemos sido, una persona que no entendía que la estábamos intentando ayudar.

Además, Lia carga con el fantasma de Cassie, que en realidad no es su amiga muerta sino sus demonios en forma de persona conocida y que quiere acabar con ella y hacerla sentir culpable.

Recomiendo el libro porque estas cosas son importantísimas y aunque me costó a ratos leer cómo se sentía Lia, ha sido muy significativo acercarme a lo que pueden sentir las personas con esta enfermedad.

En fin, que os queráis mucho y a los que os rodean.

-Ce
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La novela no está mal si sabes a lo que te vas a enfrentar: narra una historia donde la anorexia es la protagonista. No os voy a mentir, es una lectura muy oscura, bastante dura, impactante y, a pesar de ser ficticia, muy real.

Nos encontramos ante una chica que no se quiere a sí misma y se castiga negándose a comer. Veremos la lucha día a día de Lia, sus ganas y desganas a la hora de enfrentarse a tan terrible enfermedad.

Empecé a leerlo sin estar demasiado segura, más que nada por el tema que trata, pero me ha sorprendido mucho. El tema de la anorexia está tan bien documentado y tan bien escrito, que se hace corto.

La autora tiene una forma de narrar que hacía tiempo que no veía. Una escritura delicada, con párrafos llenos de metáforas muy profundas e impactantes por la crudeza que transmiten; el estilo varía del realismo más frío y directo a la poesía en forma de prosa.

En cuanto a los personajes, a excepción del chico (cuya relevancia es más bien poca), están muy bien perfilados.

El libro tiene algunos detalles curiosos: cuando Lia piensa algo que no debe, aparece tachado; cuando pierde el conocimiento, las dos páginas siguientes están en blanco; y, por supuesto, no puede faltar su manía de saber cuantas calorías tiene lo poco que consume.

En bastantes ocasiones me dejaron alucinada las ocurrencias de la protagonista para evitar que descubrieran su peso, cómo enmascarar su sufrimiento y cómo se empecinaba en que no la ayudasen. Era desgarrador ver que su cuerpo mataba por comer una migaja, pero su cabeza se cerraba en banda y casi proclamaba que comer era pecado. O cómo los padres de Lia estaban dispuestos a hacerle comer a la fuerza con tal de que se recuperara. Tiene que ser horrible ver cómo un ser querido se está muriendo de hambre y no quiere reaccionar.

Si estáis hartos de libros juveniles llenos de adolescentes populares con vidas perfectas y cuya mayor preocupación es ligar con una u otra persona, os aconsejo que le echéis un vistazo a este libro. Siempre y cuando estéis preparados para mirar al otro lado del espejo...

Saludos ;)

Tenía muchas ganas de leer este libro, aunque me daba miedo que por tratar el tema de la anorexia tirara mucho de tópicos… y en absoluto. Me llevé una muy buena sorpresa.

Nuestra protagonista es Lia, que pasa su día a día contando calorías y buscándose medios para que el resto no note su casi constante pérdida de peso; ojo, que se encuentra en una situación en la que ha sido y está siendo tratada, es decir, no es la típica historia en la que vemos cómo la protagonista se adentra en la boca del lobo: ya está ahí.

Su amiga Cassie, con quien pactó ser la más delgada, finalmente ha fallecido… y se le aparece en sueños para repetirle que quiere llevarse a Lia con ella. Todo buen rollo.

Si Lia se mantiene medianamente (y estoy siendo muy benévola) en sus cabales en cuanto al tema del peso, es por su hermana pequeña, a la que adora, pero a veces se nubla y evidentemente, pincha.

La verdad es que, como he dicho al principio, me apetecía un montón leer este libro, pero si no lo he hecho antes ha sido porque pudiera tratarse la enfermedad desde una perspectiva errónea y suavizada. Y nada más lejos.

No vemos la típica escena de la chica que vomita, se pesa siete veces por hora y discute hasta la saciedad para que los que la rodean vean lo equivocados que están, sino que se adentra también en la parte psicológica, en cómo se debate ella entre el “sé que estoy enferma, tengo que salir por mí y por mi familia” y el “tengo que llegar a mi meta de X peso como sea”, pasando incluso por la autolesión. Y resulta muy abrumador.

Tengo que decir que he vivido el tema muy de cerca, en dos ocasiones, y es una historia en general es bastante realista, coincidiendo mucho en acciones y pensamientos, a la par que sensaciones… incluso en el comportamiento de la gente de alrededor.

Es una novela súper interesante y recomendable, aunque evidentemente trata uno de esos temas de los que la gente directamente huye; pero tengo que decir que es una de las más realistas que he leído sobre anorexia/bulimia (no sopoooorrrrto “Las chicas de alambre”, que lo petó cuando estaba en el colegio y de hecho nos lo hicieron leer para debatirlo en clase).

Por mi parte, ahí lo dejo. Dadle un tiento.
Enlace: https://locaporincordiar.blo..

Laurie Halse Anderson es mi escritora favorita, ya que consigue acercarse al lector de una forma mágica mediante una prosa exquisita, poética y muy bien cuidada, que te hace disfrutar de sus libros de principio a fin.
En este libro conocemos a Lía, una chica que se repite constantemente que no debe comer. Su vida gira en torno a contar calorías y a hacer ejercicio cuando la han obligado a ingerir una cantidad de alimentos que ella considera excesiva. Y ahora su mejor amiga Cassie, con la que llegó al terrible pacto de convertirse en la más delgada del instituto, acaba de fallecer y la persigue en sueños, pidiéndola que no deje atrás el pacto y que se reúna pronto con ella.
Como veis, nos encontramos ante un libro que trata un tema duro y difícil, como es el de los trastornos alimenticios, pero la autora lo hace mediante una prosa muy bien cuidada y sobre todo, demostrando la profunda documentación que ha llevado a cabo antes de embarcarse en la creación de esta novela.
De esta autora ya había leído anteriormente otro de sus libros, “Cuando los árboles hablen”, con el que ya quedé maravillada y enganchada a la pluma de esta escritora, que es capaz de tratar temas duros de un modo muy acertado, cercano y sobre todo, de una forma muy natural.
Volviendo a “Frío”, en cuanto empiezas su lectura, te introduces en la vida de la protagonista comprendiendo cada uno de sus sentimientos y pensamientos con suma facilidad, sumergiéndote en la historia con rapidez y antes de que te des cuenta, el libro ha volado en tus manos. Vas viendo y viviendo la transformación que sufre Lía, las etapas por las que va pasado tanto física como psicológicamente y como eso va haciendo que cambie todo a su alrededor.
Presencias los momentos de avance y de retroceso, los pasos en falso y los errores que irán guiando al lector en una espiral de sentimientos y de lucha interna en el que se ve envuelta la protagonista debido a su trastorno y donde comprendes y sientes la fuerza que mantiene a Lía unida a ese mundo y la necesidad de ayudarla a salir de él.
A parte de esto, hay algo más que quiero destacar y es el uso que hace la autora de las metáforas que envuelven al libro con frases verdaderamente preciosas y muy bien elaboradas que no hacen más que aumentar la calidad de esta obra.
Y aunque este libro está dedicado en un primer momento a un público juvenil, en mi opinión lo extendería a un ámbito juvenil y adulto, ya que sea cual sea la edad del lector, mientras se hable de un público juvenil en adelante, disfrutarán de este libro y quedarán maravillados con esta escritora de la que ojalá podamos ver cada vez más libros suyos traducidos en las librerías españolas.
Enlace: Http://guardianadelibros.blo..

Frío es una historia muy dura y realista. Me hizo sufrir de principio a fin y no les miento, lloré muchísimo, porque sentía pena por Lia y me sentía tan impotente al leer las cosas que se hacía así misma. Pero Laurie Halse Anderson nos regala una historia bien dramática, triste y tan bien construida. Les juro que me enamoré del estilo de la autora y me estoy arrepintiendo de haber leído este libro antes de Speak (tengo tantas ganas de leer Speak!). Pero la aplaudo por conseguir un personaje tan complejo y usar recursos tan geniales para construir la historia.

No sabía qué esperar cuando comencé a leer esta historia y definitivamente me sorprendió. Existen advertencias para trastornos de la alimentación, autolesiones, suicidio y problemas de salud mental ... Frío es una lectura emocionalmente agotadora que nos muestra la lucha del personaje principal con su trastorno alimentario y la forma en que se ve a sí misma y al mundo que la rodea. No es una lectura fácil o feliz, pero pensé que el tema estaba bien manejado y representado en Lia. La prosa es a la vez hermosa, casi bordeando el reino del realismo mágico y al mismo tiempo de alguna manera me molestó en algunos puntos. Nombré realismo mágico porque la escritura a veces casi tiene esa sensación de magia, especialmente en las descripciones de cómo Lia se ve a sí misma y al mundo. La historia también tiene un toque paranormal con una sensación simbólica; esos dos aspectos hacen que sea difícil ubicar correctamente la historia en un solo género. Supongo que puedes decir que esto es principalmente una historia de ficción realista con un ángulo de salud mental, donde podemos ver cómo el trastorno alimentario se apodera de la vida de Lia a través de sus propios ojos. Tuve una relación de amor/odio con el estilo de escritura, pero no hay duda de que la escritura tiene esa sensación original y casi de otro mundo y puedo entender por qué tanta gente parece amar esta historia.

Agh, ¿qué rayos acabo de leer? Este libro, a pesar de ser cortito, se me hizo super eterno y creí que jamás lo terminaría. Para empezar: Lia es una pesada insoportable que no hace más que quejarse y regodearse en su miseria. Sé que eso me gusta, pero que cada párrafo lo repita es abrumado, cansado y tedioso.
Sobre el tema principal, los trastornos alimenticios. Creo que la autopercepción que manajó Lia fue muy realista y no cayó en la exageración o el dramatismo. Sin embargo, las razones que la llevaron hasta la anorexia son vagas y no nos dan una idea real de cómo la predión social influye en la percepción que tenemos del concepto de belleza y cómo es seguir los estándares de moda y talla.
Por otro lado, los personajes secundarios son vagos, sin mucha fuerza y no aportan mucho a la historia ni dan apoyo (real) a la protagonista. Y Cassie, oh, Cassie, lamento mucho que hayas muerto para ejemplificar a lo que conduce la bulimia si no se trata.
En general «Frío» es una novela que cuenta crudamente el sentir de una persona con un trastorno alimenticio, pero no llega a más, se queda en un retrato crudo.

Narrado en primera persona, desde la perspectiva de Lía, nuestra protagonista, quien vive en la anorexia.

Los personajes principales yo diría que son Lía y Cassie, aunque encontremos a la familia de Lía también muy presente.

El libro está escrito en capítulos cortos, con lo cual hace que la lectura no agobie ni canse.

Algo que tiene de diferente este libro es que Lía cuando habla de comida cuenta las kilocalorias, cosa que no he visto en ningún otro libro, además de que trata el tema de la anorexia y la bulimia dando a conocer lo que puede ocurrir.


Lía acaba de perder a su amiga Cassie, quien murió sola en una habitación de hotel después de haberle llamado 33 veces. Desde este momento, Lía empieza a ver al fantasma de Cassie y su vida vuelve a ponerse en peligro por culpa de la anorexia.

El libro no me ha acabado de gustar, más que nada porque me ha producido algunos problemas en mi persona, que no me gustaría comentar aquí.

Lía me parece una persona que se deja demasiado influir por lo que dicen los demás, ya la habían ingresado en el hospital una vez por la anorexia, así que mi cabeza no deja de decirme que porqué no tuvo más cuidado de ella misma sabiendo lo que podía pasar.

Algo que si que me ha gustado, es que la autora ha mostrado lo que puede llegar a producir la anorexia o la bulimia, la muerte, en pocas palabras, es el caso de Cassie, quien ahora ha vuelto para llevarse con ella a Lía.

En definitiva, creo que es un libro que se debería leer aquellas personas que están pensado o que están dentro ya de estas enfermedades, para darse cuenta de que se juegan la vida.
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