Este libro es una auténtica sorpresa. Grata y bienvenida. Cada cuento es de una exquisitez extraordinaria. Aunque son excluyente, el universo del autor está presente en cada letra de las páginas que lo componen, un universo compuesto por bondad, sentido común (de ese, del desconocido, del que no practicamos) magia (de la buena). Diría que se podría tomar los personajes y hacer una única novela, porque aunque variopintos (borrachos, presos, adúlteros, suicidas, filósofos) en cada historia yace un alma, el alma de la humanidad, pidiendo a gritos por su rescate. Leo para sentir ( todo el tiempo lo digo) y agradezco haber tenido este libro. La buena literatura se está perdiendo. Soy bendecida, existe un autor contemporáneo, que camina las calles que yo veo, que escribe cuentos como los dioses. Leeré cada hoja suya que aparezca: a por ellas Álvaro Díaz, por la calidad sólo estás recibiendo el dictado del Olimpo, no sé si creas en eso y yo soy atea (jajajaja) pero me gusta pensar que detrás de cada cosa hermosa, hay una conexión con algo superior, de la que todos somos sus hijos y algunos, como tú, son triplemente bendecidos. + Leer más |