La buscadora de niños

La verdad es que no sé por dónde empezar. No sabía ni qué nota ponerle a este libro, a decir verdad, porque estoy bastante confusa y, en cierto modo, decepcionada.
Comenzaré diciendo que yo he leído este libro en dos partes; es decir, leí la mitad e hice un parón de semanas por cuestiones personales y lo retomé hace unos días, para terminarlo. Por eso puede que haya algunas cosas que se me han hecho muy confusas y extrañas, así que eso no lo tengáis en cuenta. Pero es muy rápido de leer, una vez me ponía leía bastantes páginas.
Diré los aspectos positivos primero, y después seguiré con los negativos, aunque están relacionados en algunos casos. Comencemos.
Está muy bien escrito, con un lenguaje un poco complejo pero no es difícil de leer; simplemente no es lo más fácil que te puedas encontrar, pero está bien. Hay frases preciosas que realmente te hacen reflexionar o con las que te puedes identificar, y eso me gusta mucho. También destaco que la historia está muy bien construida, todo está conectado y, aunque esas conexiones tarden en descubrirse, está muy bien, de verdad.
Por otro lado, trata dos temas muy importantes. Uno es lo mal que lo pasan los niños que son abandonados o que pasan por hechos traumáticos en su infancia, lo mucho que les puede afectar. Y otro es lo que pasa entre el Señor B y la Niña de Nieve. No quiero entrar en detalles porque no quiero hacer spoilers, pero fue algo que me costó leer debido a que es algo que pasa hoy en día, y a veces hay que leer cosas así para darnos cuenta de que suceden. Esa parte es un poco turbia y extraña, pero es necesaria.
Y hablando del Señor B, quería destacar que es un personaje complejo, que esconde cosas y que ha pasado por cosas horribles, pero su comportamiento me da asco (como supongo que le pasará a todo el mundo que lo haya leído). Me sorprendió descubrir su historia, pero tampoco fue para tanto.
Al final por fin llega la acción y lo más emocionante. Porque, aunque durante toda la novela tendría que haber estado deseando descubrir qué iba a pasar (como me ha pasado con otros thrillers que he leído), no ha sido así. No me ha enganchado mucho y tampoco es que tuviera muchas ganas de seguir leyendo. Y el misterio se resuelve de una forma que no me gustó mucho, me pareció demasiado simple y fácil. Aun así, repito que las escenas finales me gustaron bastante.
Hablando de los personajes: había demasiados. Confundía a las personas que se iba encontrando en el pueblo, aunque también puede ser por el parón que hice. Tampoco le cogí cariño a ningún personaje, y eso es muy raro. No hay mucho amor en la historia, pero yo siempre shippeo a algunos personajes, y en esta ocasión me daba igual. Y no me ha hecho sentir muchas emociones, que digamos.
Centrémonos en Naomi. Es un personaje que me ha dado igual. Y es que, tal y como la planteaba, podría haberse sacado una pedazo de historia de ella. Pero no lo ha desarrollado del todo y eso me ha fallado bastante. Mezclar el misterio con su trabajo y con su pasado habría sido una bomba: impresionante. Pero es eso, me ha faltado algo.
Debo añadir que el libro está narrado en 3 persona, pero va contando simultáneamente la búsqueda de Naomi con la vida de la niña de nieve. A veces me costaba saber de quién se estaba hablando, ya que en el mismo capítulo se mezclaban las historias, pero no es un gran problema.
Con todo esto no quiero decir que sea un libro malo ni mucho menos, simplemente creo que no ha sido un libro para mí, y que otras personas podrían disfrutarlo bastante. A mí no me ha llegado nada, pero sí que sé que es un libro bueno. Os animo a que lo leáis.

Con una pluma detallada y tocando temas duros y crudos con mucho tacto, la autora ha construido una historia que va por dos caminos paralelos, primero contando la vida y el pasado misterioso de Naomi y a la vez la historia de Madison. Hacerlo de esta manera es un acierto porque a pesar de estas dos tramas a mí me costó meterme en la historia y hay partes un poco lentas donde no ocurre gran cosa, pero saber más sobre Naomi o sus casos es interesante y atrayente.
Se cuenta desde varias voces, a veces puede resultar confuso, pero te da una visión global de lo que está pasando y mayor protagonismo a todos los personajes. Me he quedado con las ganas de saber muchas más cosas sobre Naomi (la protagonista), pero por lo que he visto este libro va a tener una segunda parte donde se va a centrar en ella, así que estoy deseando leerlo. No os asustéis porque la trama principal del libro queda bien cerrada.
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Naomi es una chica que trabaja buscando a niños desaparecidos y cuyos casos quedan abandonados. La buscadora de niños la llaman. Pero se encuentra con el caso de Madison que hará que empiece a recordar algo de su pasado.
Ha sido un libro con una premisa interesante pero con un inicio lento. Está narrado en tercera persona, y en varias Partes: Naomi, la niña de nieve y el pasado de Naomi. A veces se me hacía pesado los cuentos de la niña de nieve pero casi a la mitad del libro se empieza a poner interesante. Es un libro que tiene pocos giros pero aún así engancha. al final no he podido evitarlo y he soltado alguna lagrimilla. Solo por ese final le he subido a 4 estrellas, y espero que tenga segunda parte porque me gustaría saber más sobre ese caso que toma después del de Madison.

Nos encontramos frente a un thriller, donde nuestra protagonista, Naomi se dedica a buscar niños desaparecidos cuando ya nadie sigue con su búsqueda. En esta oportunidad, no solo tendrá que investigar y seguir pistas, sino que también tendrá que enfrentar sus propios monstruos de su pasado y descubrir el significado de sus propios sueños.

La autora ha logrado con su pluma una historia fuerte y desgarradora. A lo largo del libro encontramos algunos relatos de Madison, la niña que Naomi está buscando, donde nos cuenta lo que está viviendo, y lo hace desde su inocencia y la magia de los cuentos infantiles que conoce, lo que toca el fondo del corazón del lector e inevitablemente crece un nudo de angustia; digo esto porque llegaba a partes donde me superaba la sensación de impotencia y la bronca. Es increíble la mezcla de sensaciones que la autora logra provocar en el lector. Además de la sutileza con la que trata un tema tan grave como lo es el abuso sexual.

El libro cuenta tres historias a la vez de diferentes personajes, pero en ningún momento pierde al lector.
Me gustó mucho el personaje de Madison, me gustó la valentía con la que enfrentó cada situación, a pesar de su corta edad. También Naomi es un personaje valiente, con sus sombras que la persiguen día a día; sabemos muy poco de ella, pero lo creo necesario, ya que es una característica de estos personajes que de una forma u otra han tenido que atravesar momentos duros en la vida, y se refugian en ellos mismos para protegerse, escudarse y seguir adelante. Con respecto al señor B, no tengo claro si me cae bien o mal; a medida que avanzamos conocemos su historia y en parte justifico su accionar.

Cuando leí la sinopsis de la buscadora de niños me llamó mucho la atención y me pareció ser un libro que prometía mucho a pesar de sus pocas páginas, y sin dudas lo cumplió. Es una historia fuerte, pero muy bien armada y narrada, y me ha encantado. Si son fanáticos del thriller deben darle una oportunidad.
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La historia nos presenta a Naomi, una investigadora privada que se encarga de encontrar niños desaparecidos como es el caso de Madison Culver, una niña de tres años que lleva varios años desaparecida; pero sus padres no se dan por vencidos. La trama trata sobre la investigación del caso de Madison a la vez que relata el pasado de la protagonista junto con otros casos que ha tenido. Ella también ha sido una niña perdida, lo que explica su tremenda implicación en todos los casos que ha tenido.
Las voces de Naomi y de Madison se entremezclan en cada capítulo, pero el hecho de separar las voces con un cambio de párrafo es un poco lío. Porque la autora está contando la historia de Naomi en el presente y con apenas un punto y aparte se va al pasado sin avisar y te das cuenta del cambio porque dice que era una niña.

Ocurre lo mismo con el cambio de personaje. Piensas que sigue contando la historia de Naomi y en realidad se trata de Madison. Esto me ha creado mucha confusión.
La estructura es la siguiente, el libro está dividido en 17 capítulos y tiene en total 220 páginas.
La narración es en tercera persona; muy acertada. Además introduce parte de los fragmentos como cuentos de hadas con el famoso "Érase una vez...".
El lenguaje es comprensible y es una lectura muy amena.

De entre los personajes está Naomi que es un personaje fuerte, con un pasado traumático que su cerebro se encargó de borrar para evitar mayor sufrimiento en ella. En cambio en sueños tiene grandes pesadillas a las que no sabe dar respuesta. La trama que se desarrolla a partir de este personaje queda un poco abierta.
Por otro lado está Jerome su "hermano adoptivo" que no son hermanos pero apoya a Naomi en todas sus decisiones y es su principal apoyo. Hubo una parte del libro en que me dio pena porque lo veía muy factible... No voy a hablar más de Jerome porque tengo riesgo de spoiler...
La historia de la niña de la nieve es muy conmovedora y se entiende como al explicación de por qué Naomi se dedica a buscar niños perdidos.
Algo que me ha gustado muchísimo ha sido la sutileza y el tacto con el que la autora narra escenas bastante desagradables, ayudando a que el lector no sufra demasiado.
Por otro lado me ha gustado muchísimo la historia que hay detrás de Naomi y me ha dejado con muchas ganas de saber más. He estado investigando y he podido averiguar que va a tener continuación se llamará "The Strawberry Palace" pero no sé si lo traerán a España. ¡Espero que sí!
Mi valoración final es positiva. Es un libro que trata un tema doloroso pero está narrado desde el respecto. Aun así somos capaces de sentir las duras situaciones que viven los personajes. Esperaba algo muy distinto a lo que realmente sucede y por eso me ha enganchado tanto.
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La historia me ha gustado mucho. La autora nos cuenta una historia terriblemente dura pero de una forma muy bella. La desaparición de niños y niñas no es un caso aislado. En el mundo entero debe haber millones de casos y creo que no asimilamos del todo lo que significa que un niño o niña desaparezca. En muchos casos son secuestros parentales, en otros casos se lleva a estos niños/as para traficar con ellos/as, y en otros casos , por desgracia, hay personas que se los llevan para abusar de ellos y de ellas. Esta novela te hace reflexionar sobre estos niños y niñas desaparecidos que hay en el mundo. ¿Dónde estarán ahora? ¿Estarán muertos o estarán sufriendo un infierno? También hay que pensar en las familias, en la tristeza y desesperanza que les asolan tras perder a su pequeño/a sin saber dónde está y lo que le ha pasado. Sinceramente, no me quiero imaginar el sufrimiento y no se lo desearía a nadie, ni a mi peor enemigo/a. Por esto digo que La Buscadora de Niños es un libro muy duro que toca el tema de la desaparición de los niños y de las niñas de una forma que te hace pensar mucho.

Los personajes me han gustado, me han parecido bastante correctos. El personaje principal es Naomi y gracias a sus puntos de vista, comprenderemos porqué está tan obsesionada con encontrar niños perdidos y su lucha diaria con su pasado. La historia de amor que hay en el libro me ha gustado, me ha parecido bien llevada y al estar en segundo plano no tenemos un exceso de amor que nos podría haber molestado si la autora le hubiera dado más importancia. El segundo personaje que más me ha gustado a parte de Naomi ha sido Madison. Es muy duro ver como una niña va creciendo atrapada de las fauces de un lobo feroz y depravado. Como le cambia la personalidad, como se tiene que adaptar a esa situación tan horrorosa. Como ves con horror como Madison empieza a sentir verdadero amor por su secuestrador. El tema de los abusos infantiles es tambien un tema durísimo y está tratado con suma delicadeza. Aun así, no puedes evitar horrorizarte. El personaje del Señor B tambien me ha gustado y esconde su propia historia. Me ha dado hasta pena, hasta que he recordado lo que le hace a Madison. Ahí ya se me fue toda la pena.

En cuanto a las cosas que no me han gustado...hay muchos puntos de vista en la novela pero el problema es que cambian sin previo aviso. En un momento estás leyendo el punto de vista de Naomi, y luego de pronto pasa al de Madison y luego sin aviso pasa al de Jerome. Me he sentido un poco confusa y me ha frustrado un poco/bastante a la hora de leer la novela.

Me hubiera gustado que se profundizara más en la historia de Naomi. Durante toda la novela te van dando pistas y retazos de lo que en verdad le ocurrió a nuestra protagonista pero no te explican nada. La novela acaba con un final medio abierto por lo que espero que si hay segunda parte, podamos ver por fin el paso de Naomi de forma completa.

El ritmo es un poco lento y hay momentos en los que no pasa nada, solo Naomi yendo de un lugar a otro sin que ocurra nada relevante. Estas escenas me han llegado a aburrir. Y esto es todo lo que no me ha gustado. En general, es un libro que he disfrutado con unos cuantos fallos que he han lastrado un poco la lectura.

En definitiva, La Buscadora de Niños es un interesante thriller sobre la desaparición de niños y niñas y sobre el abuso infantil. Una historia muy dura pero bellamente contada. Tiene algunos problemas con el ritmo y con los cambios en el punto de vista de los personajes pero en general es un libro que he disfrutado.

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La buscadora de niños me dejó con el corazón roto pero a la vez muy ligero. Es una obra que a pesar de toda la oscuridad que puede albergar tiene mucha esperanza, una manera de plantear las cosas que llega al alma y que, para todo aquel que como a mi le de reparo este tipo de argumento, puede leerlo sin sentir esa asfixia, aunque si advierto que lágrimas habrá, eso si, con un muy buen final.

Rene Delfed sin lugar a dudas se merece estar entre mis autoras fichadas, para cuando necesite algo distinto y que sé que me va a dejar más que satisfecha. ¡Feliz lectura!
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Naomi es una joven investigadora privada que lleva más de 8 años dedicada a la búsqueda de niños desparecidos, lo que le ha valido el sobrenombre de la buscadora de niños. La familia Culver la contrata para que encuentre a su hija Madison que despareció cuando tenía cinco años. La niña se perdió en la montaña, tres años antes, cuando fue con su familia a buscar un árbol de Navidad.

La novela es muy fácil de leer a pesar de los temas de fondo que trata, es posible que que en parte por la forma de narrar que os he comentado antes. Aunque el libro tan solo tiene 224 páginas, creo que están muy bien aprovechadas. Nos habla de la desaparición de niños y la forma en que eso afecta a las familias, del terrible tema de la pedofilia y de lo poco que se hacía, no hace tantos años, por solucionar el problema. También encontraremos una denuncia de fondo de casos de discriminación y racismo.

El caso de la desaparición de Madison queda totalmente cerrado y explicado, así como el otro caso del que se ocupa Naomi mientras busca a la niña. Lo que he echado en falta es saber más sobre el pasado de Naomi. Sería estupendo que la autora escribiese más libros con ella como protagonista donde, al igual que en este, nos fuesen descubriendo partes de su historia a la par que nos relata un nuevo caso. He buscado información, pero como yo no me apaño muy bien con el inglés no la he encontrado, pero si los publican me encantará leerlos. También tengo mucha curiosidad por su anterior libro, y espero que lo traduzcan pronto al español.

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