"El palacio de papel" de Miranda Cowley Heller saldrá a la venta el 16 de septiembre y agradezco a Babelio y a la editorial poder leerla de forma anticipada. La historia comienza a las 6:30 del día uno de agosto de un año sin precisar, aproximadamente 2018 o 2019. Elle nos cuenta que la noche anterior mantuvo relaciones sexuales con su mejor amigo. A continuación, y en el mismo capítulo, la narradora nos traslada a diciembre de 1966 para relatarnos su propio nacimiento. La narración es en primera persona tanto en la parte del presente como en la del pasado, siempre con la voz de Elle. Los saltos en el tiempo son continuos pero es muy fácil saber donde estamos. Los capítulos del presente llevan la hora en su encabezamiento, sin fecha ya que corresponden al mismo 1 de agosto. Los otros indican fecha y lugar, tanto en el pasado reciente como en el cercano. Al principio parece un poco lioso pero se le pilla el truco rápido. Y de las cinco partes que conforman la novela, en algunas solo tenemos referencias al pasado, en diferentes épocas y ubicaciones. La protagonista es Eleanor y ella misma nos narra su infancia y los sucesos que la convierten en la persona que es. También nos pone al día sobre las vidas de su madre y de la abuela materna. Las historias son muy interesantes y necesarias para entender a la protagonista y las decisiones que toma. La autora nos ofrece las suficientes descripciones para ubicarnos en el tiempo y el espacio, pero no tantas como para sacarnos de la historia relatada en cada momento. Elle parece tener una buena vida en el presente, con un marido atento y cariñoso y tres hijos. Pero el pasado llama de nuevo a su puerta y le hace pensar en cómo sería su vida de no haber tomado ciertas decisiones. Me ha gustado mucho el libro. Algunas de las situaciones narradas son muy duras y hacen que sufras con ellas. Ves a los personajes tomar decisiones, en ocasiones equivocadas y en otras condicionadas por otros, y te planteas que habrías hecho tú de estar en su lugar. Las vivencias de Nanette y Wallace, abuela y madre de Elle, son intensas y muestran un patrón de abusos, desapego y decisiones equivocadas que condicionan las vida de sus respectivos vástagos. Los continuos saltos temporales agilizan la lectura y te dejan con ganas de saber más. Supongo que habrá lectores a los que tanto cambio no les guste, pero para mí es un acierto total. También son muy importantes para entender las decisiones de Elle y Jonas, no en vano los comportamientos de los padres influyen mucho en los de los hijos. Elle me ha gustado mucho como protagonista, es buena persona a pesar de la infidelidad. Llegas a entender los motivos e intentas descubrir qué decisión va a tomar respecto a ella. En general me gustan todos los personajes, tanto los buenos como los malos están muy bien caracterizados. Wallace, la madre de Elle, tiene también mucha fuerza. En cuanto a la ambientación, me parece estupenda, es fácil imaginarse las distintas ubicaciones. Las diferentes historias están muy bien narradas, son interesantes y en algunos casos angustiantes. Ves como las acciones y secretos, propios o ajenos, condicionan las decisiones y el futuro de las personas. Aunque se nos narran diferentes historias de amor no es un novela romántica al uso, aunque creo que también gustará a los lectores habituales del género. Es muy adictiva y de no haber sido por factores ajenos al libro no me habría durado nada. La prosa de la autora hace que nos metamos rápidamente en las diferentes historias que se nos narran y que nos cueste abandonar la lectura. Falta muy poquito para que salga a la venta y os animo a darle una oportunidad. + Leer más |