La conquista de la tierra en su mayor parte no consiste más que en arrebatársela a aquellos que tienen una piel distinta o la nariz ligeramente más achatada que nosotros
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La conquista de la tierra en su mayor parte no consiste más que en arrebatársela a aquellos que tienen una piel distinta o la nariz ligeramente más achatada que nosotros
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Frío, niebla, bruma, tempestades, enfermedades, exilio, muerte acechando siempre tras los matorrales, en el agua, en el aire. ¡Deben haber muerto aquí como las moscas! (cap. 1)
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Vivimos igual que soñamos: solos.
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No me gusta trabajar –a ningún hombre le gusta– pero me gusta lo que hay en el trabajo, la oportunidad para encontrarte a ti mismo. Tu propia realidad, para ti, no para otros, lo que ningún otro hombre podrá saber.
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Pude distinguir cada una de sus costillas, y las articulaciones de sus miembros eran como nudos en una soga; cada uno llevaba un argolla de hierro en el cuello, y todos estaban unidos por una cadena, cuyos eslabones oscilaban entre ellos al tiempo que tintineaban rítmicamente.
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Él pudo verlo y disfrutarlo mientras estuvo en condiciones de ver, porque el aprecio a ese material le duró hasta el final.
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El silencio de la tierra se adentraba en el mismo corazón de uno, con su misterio, con su grandeza, con la asombrosa realidad de su vida oculta.
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Aullaban, saltaban, giraban, hacían muecas horribles; pero lo que en verdad estremecía al pensamiento era la idea de que poseían una humanidad, idéntica a la propia, la idea del remoto parentesco con su salvajismo.
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No, es imposiblecomunicar la sensacion de vida de una epoca determinada, de la propia existencia. Vivimos como soñamos..solos
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Esa fuerza no es más que un accidente, resultado tan solo de la debilidad de los otros.
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Es un poema épico griego compuesto por 24 cantos, atribuido al poeta griego Homero. Narra la vuelta a casa, tras la guerra de Troya, del héroe griego Ulises