Criminal 7. Mal momento, mal lugar

Con motivo del décimo aniversario de la publicación de la serie Criminal, este magnífico tándem se animó a hacer un especial compuesto por dos historias enlazadas, protagonizadas por Teeg Lawless y su hijo Tracey, aparecidos ambos anteriormente en algunos números de la serie.

En la historia llamada Mal momento Teeg se encuentra cumpliendo condena en la cárcel por un atraco. Su intención es pasar los días tranquilamente leyendo cómics hasta obtener la condicional, pero alguien no está interesado en que salga vivo de allí. Tras una reyerta y pasar escondido en la biblioteca su última noche en la cárcel, utilizará su recién estrenada libertad para encontrar a la persona que quería matarle. Pero antes de eso tendrá que retomar sus responsabilidades como padre, y se llevará al mayor de sus hijos, Tracey, en su particular road trip de la venganza.

La historia continúa en Mal lugar, capítulo visto desde los ojos de Tracey. El viaje de su padre les llevará a recorrer un porrón de millas hasta un pueblo remoto de la geografía estadounidense. Allí conocerá a una niña con la que pasará el rato mientras su padre se dedica a buscar a quien deseaba su muerte, que no era otro que su antiguo compinche, que supuestamente le guardaba el dinero del robo (pero no fue así, claro). Para Tracey este será un viaje iniciático para convertirse en sucesor de su padre, teniendo que aceptar su falta de piedad.

Lo que más ha soprendido de este volumen es la mezcla de las historias de Teeg y Tracey con los cómics que están leyendo en cada momento, por un lado la historia subidita de tono de Zangar (una especie de Conan), y por otro la de Colmillo, el hombre lobo kung fu. Me pareció una herramienta genial para ambientar en una determinada época la historia y también para aligerarla, consiguiendo darle un toque especial. Encantada de volver a disfrutar de lo que producen estos cracks, la verdad.