Mis únicos compañeros habían sido niños poco amables, y muchachas ignorantes y obstinadas, de cuya agotasora insensatez la soledad ininterrumpida a menudo era un alivio sinceramente deseado y muy apreciado.
|
Mis únicos compañeros habían sido niños poco amables, y muchachas ignorantes y obstinadas, de cuya agotasora insensatez la soledad ininterrumpida a menudo era un alivio sinceramente deseado y muy apreciado.
|
Estaba bien que fueden robustos; sin embargo, hubieran debido aprender a tener consideración por los que éramos menos. Pero no debo culparles por lo que, quizás, fuera culpa mía, pues nunca hqcía objeciones a sentarme donde ellos qieríam, tontamente decidida a correr el riesfo antes de molestarles
|
No puedes esperar que la piedra sea tan dúctil como la arcilla
|
La adversidad me había hecho madurar y la experiencia me había enseñado, y ansiaba redimir el honor perdido a los ojos de aquellos cuya opinión me importaba más que ninguna otra del mundo
|
Puede que las circunstancias cambiaran y que esta casa no volviera a ser mi hogar nunca más
|
Aunque las riquezas tenían su encanto, la pobreza no encerraba ningún terror para una joven sin experiencia como yo
|
Todas las historias verdaderas contienen una enseñanza, aunque ese tesoro puede ser difícil de encontrar y, en ocasiones, cuando por fin se halla, el fruto que se obtiene resulta ser un grano tan seco y arrugado que apenas compensa el esfuerzo realizado para romper la cáscara. Si este es o no el caso de mi historia no es algo que yo pueda juzgar. A ratos, creo que bien podría llegar a ser útil para unos y entretenida para otros, pero será el mundo el que juzgue por sí mismo. Protegida por mi propia oscuridad y por el transcurso de los años, y gracias a unos cuantos nombres ficticios, he perdido el miedo a aventurarme a contar mi historia y, así, con total franqueza, dispondré ante el público asuntos que no relataría siquiera a un amigo íntimo.
|
Las acciones que presenciamos cada día, las palabras que escuchamos, todo nos va conduciendo de forma natural a actuar de la misma forma que las personas con las que convivimos.
|
Me hubiera gustado decir algo para justificarme, pero cuando intenté hablar noté que me fallaba la voz y, antes de demostrar mis emociones o dejar que se me escspasen las lágrimas, decidí guardar silencio y aguantarlo todo como si de verdad fuera culpa mía.
|
No puedo imaginar muchas situaciones más hostiles que una en la que, por mucho que te esfuerces por hacer las cosas bien, por mucho que te esfuerces por cumplir tus obligaciones, tus esfuerzos son pisoteados y desde lados por las personas a tu cargo, e injustamente censurados y tergiversados por quienes están por encima de ti.
|
¿Quién escribió «Agnes Grey»?