Uno de los nuestros

Viajamos a Ebbing un pueblo costero de Londres para conocer a nuestra protagonista Elise King, inspectora de policía actualmente de baja debido a él cáncer de mama que sufre.

Los turistas y vecinos abarrotan el pueblo los fines de semana y los lugareños no están contentos con esta invasión. Todo cambiará cuando un vecino y padre de una hija con discapacidad, desaparece sin dejar rastro pero no solo Elise tratará de encontrarle.

El comienzo del libro es bastante impactante lo que ya invita a seguir leyendo aunque para mí gusto la trama ha ido de más a menos ya que la manera de hilar no me ha convencido del todo además alguna parte ha sido previsible prácticamente desde el comienzo.

Con respecto a los personajes he de decir que todos ellos son muy diferentes y sin duda una de las partes que más me ha gustado de esta lectura es la visibilidad que da la autora a las personas con discapacidad.

La realidad de una mujer con cáncer de mama que tiene que compaginar su trabajo, su vida personal mientras lucha cada día contra esta enfermedad es otro de los puntos que más quiero resaltar ya que la autora consigue que el lector empatice con la protagonista completamente.

Una lectura ágil, con algún que otro giro y donde su punto fuerte sin duda reside en los personajes.

Thriller narrado a varias voces en presente y en pasado ambientado en un pueblo costero y en el que destaco, especialmente, el personaje de la detective Elise, de baja por un cáncer de mama. Luego está Dee, la única con una narrativa en primera persona que limpia casas y parece conocerlo todo de los vecinos, a quienes la muerte de Charlie, un hombre de unos setenta y pico años consterna al pueblo. A partir de ahí, todo es posible... pero algo predecible. Engancha, todo cuadra, vas atando cabos rápidamente y hay algunos giros, pero no de los que sorprenden o sobresaltan. En líneas generales es un buen thriller, pero he echado de menos el desarrollo de otros personaje interesantísimos como la vecina de Elise, una "detective" aficionada y más intriga, que fuera menos predecible.