Hay libros que llegan justo en el momento adecuado. Esto es lo que me ha pasado con "Un par de manos". El mes de julio no fue fácil en muchos sentidos, complicó muchas cosas, entre ellas mi concentración y mi ritmo de lectura, digamos que leí poco y mal, hasta que Monica vino a rescatarme y a devolverme la lectura. . En este libro la autora nos hace cómplices de sus anécdotas y experiencias como doncella y cocinera y lo hace con mucha gracia. Monica es pura chispa e ingenio. También un poquito torpe para el trabajo doméstico, pero lo suficientemente inteligente y resolutiva como para salir airosa de casi cualquier situación. . "Un par de manos" es una suerte de memorias divertidísima que me lo ha hecho pasar realmente bien. Eso si, no he podido evitar preguntarme si ese tono hubiera sido el mismo si Monica Dickens no hubiera disfrutado de una posición privilegiada que le permitía abandonar el trabajo cuando le venía en gana. No es mi intención quitarle valor, Monica se dejó la piel en cada trabajo y sin necesidad de ello decidió salir de la comodidad de su hogar y enfrentarse al mundo y sus miserias. . Es la segunda novela que leo de la autora, y si bien "Mariana" me gustó mucho, mi conexión con "Un par de manos" ha sido máxima. Se ha convertido en uno de esos libros a los que acudiré más de una vez cuando necesite refugio. + Leer más |