Se acabó el pastel: 65

"--¿Por qué crees que debes convertirlo todo en un relato? --me preguntó Vera.De modo que se lo expliqué.Porque si cuento la historia, domino la versión.Porque si cuento la historia, puedo hacer reír; y prefiero que se rían a que tengan lástima de mí.Porque si cuento la historia, no me duele tanto.Porque si cuento la historia, puedo soportarla."A finales de los años setenta Nora Ephron estaba casada con Carl Bernstein, periodista famoso por destapar el caso el Watergate para el Washington Post junto con su compañero Bob Woodward. Su hazaña puede verse retratada en el cine en la película Todos los Hombres del Presidente y los cuernos que le puso a su mujer embarazada de siete meses de su segundo hijo pueden leerse en este libro y verse también en pantalla en la adaptación que se hizo protagonizada por Meryl Streep y Jack Nicholson. Todo esto que estoy contando puede parecer un pedazo de espoiler, pero lo que importa no es eso, la chicha de la historia es cómo la autora salió de ahí. Nada de Ephron y Bernstein se quedó de puertas para adentro. Ephron cambia nombres, alguna profesión, pero son menudencias, el libro es una crónica sobre el derrumbe de su matrimonio, que la autora pone a la vista de todos para hacer una especie de catarsis pública para que todos nos riamos, nos enfademos, nos sorprendamos con ella, pero nunca la compadezcamos. En ese espectáculo a veces triste y a veces bochornoso, hay espacio para recetas, chistes judíos, reflexiones sobre el feminismo y cotilleos de Washington. Un libro muy ochentero y muy difícil de encontrar si no es vía biblioteca o de segunda mano (lo he visto a precios astronómicos).