Napoléon et la France guerrière

Me motivó leer a Gérard de Nerval luego de haber asistido a un ciclo de conferencias que aún está en curso sobre "Fundadores de la Poesía francesa contemporánea". Sin gustarme la poesía mucho leí esta obra que Nerval escribió a los 16 años, de hecho un trabajo de juventud.

Es un libro corto de más de 40 páginas que contiene los poemas: "Rusia", "Waterloo", "Los extranjeros en París" y "La debilidad del exiliado".

Es en realidad un poemario sobre las desdichas, la pérdida y la caída del régimen imperial de Napoleón Bonaparte pues todos los temas son más bien elegíacos y no tratan de sus victorias o el mejor momento de la época. En los dos primeros sobre todo se habla de las heroicas hazañas del ejército francés aunque con un patetismo muy marcado lamentando la situación y las pérdidas de vidas humanas en estas campañas contra Rusia y luego contra Gran Bretaña como estos versos:

"Un ataúd, antorchas, y cantos funerarios,
guarden ese aparato para los mortales vulgares;
a las pompas humanas nada piden ...
pero la posteridad guardará su memoria,
y los ecos de los tiempos pasearán su gloria
en los climas más lejanos..."

No entra en muchos detalles de las acciones ni de los personajes, está claro que en los poemas se describen más las sensaciones e impresiones o los pensamientos tristes que pueden ocasionar los eventos desdichados como los que se describe.

El último poema quizás el más lastimero y largo cuenta las desdichas y tribulaciones por el exilio y posterior muerte del emperador de los franceses:

"Tú que parecías un dios, aunque hijo de la Tierra
¿quién podrá explicar de tu vida el misterio?
Una mañana, tú brillas como un nuevo sol
pero en la noche, al fin cansado de la victoria,
demasiado cargado de grandeza, triunfos, gloria,
caíste contra una roca con toda tu carga..."

Y al lado de las acusaciones, las frases irónicas y burlonas, de la gente que se alegró de verás de la muerte del emperador el joven Nerval advierte que Napoleón no sólo fue un conquistador más sino trató de embellecer a Francia, propagar sus ideales, cuidar las artes, rejuvenecerla en una palabra.

En general me gustó, aunque no tan exacto ni aporta detalles que me hubieran interesado la composición es buena y el uso de metáforas, símiles por doquier lo hace más agradable. Algunas realmente me gustaron, otras no tanto.