El orden de las cosas

Creo que todo el mundo se puede imaginar lo tremendamente complicado que debe ser escribir un libro, pero no te das cuenta realmente de todo el trabajo que hay detrás hasta que lo vives en primera persona, no ya escribiendo uno (mi cabeza no da para tanto), si no compartiendo el proceso de escritura con el autor. Hace ahora casi un año fui lector 0 de “El orden de las cosas”, y testigo de las horas y horas de dar vueltas hasta al más mínimo detalle con el objetivo de que todo fuese perfecto (aún recuerdo una llamada de teléfono de casi 5 horas analizando la historia después de la primera lectura).

Granada, 2020. Pandemia. Un edificio a las afueras. Diez vecinos. Todos encerrados por las restricciones compartiendo las veinticuatro hora del día. Empiezan las muertes.

Como podéis ver, me he limitado a copiar la sinopsis oficial para no desvelar ningún otro detalle ya que, ir a ciegas en la lectura es, en este caso, todo un acierto. En un claro homenaje a los “Diez Negritos” de Agatha Christie, Lydia construye una historia en pandemia, que no sobre la pandemia, en la que ese confinamiento que todos vivimos añade a la trama ese toque de misterio de habitación (edificio) cerrada que tanto disfruto siempre.

Con un estilo ágil y una prosa sencilla y fluida, el misterio engancha desde el principio, haciendo que sus algo menos de 200 páginas se devoren en apenas unas horas. Su corta extensión obliga a que la presentación de personajes se haga en un corto espacio de tiempo, por lo que en un primer momento es recomendable pararse un segundo para ubicar a cada uno en su lugar (en este caso en sentido literal), ya que el edificio donde transcurre la acción y el piso que ocupa cada vecino son fundamentales en la trama.

No quiero desvelar nada acerca del tema principal de la novela, ya que podría ser un pequeño spoiler del final. Lo que si diré es que el final sorprende, sobre todo con una última vuelta de tuerca que no vi venir.

En “El orden de las cosas” se aprecia una notable evolución en el estilo narrativo, y en ella Lydia consigue algo muy complicado cuando se trata de una novela corta, en las que generalmente se prioriza la trama en detrimento de los personajes, logrando un buen equilibrio entre ambos, haciendo avanzar la historia al tiempo que, con pequeñas pinceladas, crea personajes fácilmente reconocibles que cobran vida con la lectura.

Amiga, solo me queda darte las gracias por la confianza para ser tu lector 0 y la enhorabuena por haberte lanzado nuevamente a este complicado mundo (a pesar de miedos e inseguridades 😉), en el que estoy convencido tienes un futuro mas que prometedor.

21/9/23
Lectura conjunta de la Horda.
Libro cortito de esta autora que no conociamos,y por la sinopsis y el volumen ,la eleji para leerlo.
Historia en pandemia en un edificio de la ciudad de Granada,en una comunidad de vecinos,diez para ser exactos.
Con sus afinidades,rencillas y particularidades,sin poder salir por la pandemia,celebran un encuentro en el patio para celebrar el cumple de una vecina,algo normal,salvo por las restricciones.
A partir de ahi ,una vecina va a visitar a otra vecina para hablarle de un tema,y se encuentra a esa vecina y a su hija muertas.
La policia aparece en el edificio,por una alarma que da supuestamente una niña que teme por su vida.
Una vez la policia llega ,comienzan a aparecer vecinos muertos,y empieza a investigar y a buscar porques.
Ya cada uno que siga con la investigacion y haga sus cabañas,para no contar mas.La trama esta muy bien,y aunque el libro es corto esta muy bien narrado.Intrigante y interesante ,y mas misterioso a medida que avanzas.Contento por el resultado,y a la vez por compartirlo con mi querida Horda.Recomiendo la lectura,corta y agil,entretenida.Muchas gracias.

🔎Granada, un edificio, diez vecinos, varios asesinatos, una pandemia y un confinamiento de por medio. Este es el segundo libro de Lydia Gares y esta vez nos presenta una novela corta que te leerás de una sentada porque no podrás parar hasta llegar al final.
🏢La novela empieza presentándonos a los vecinos de este edificio, una comunidad que bien podría ser la tuya o la mía: con vecinos que se llevan, se soportan o se odian. La convivencia es difícil y lo que esconde cada uno detrás de su puerta es otra historia. Estamos en pandemia y a la policía le salta una alarma que le llevará a descubrir unas muertes en situación muy macabra. Ahí conoceremos a Ester Espejo, la inspectora, y su equipo que serán los que tendrán que llevar a cabo la investigación. No será fácil descubrir quién anda detrás de todo esto cuando nadie puede salir de casa y hay restricciones de movimiento.
❤️Narrativa ágil que te mantiene en tensión, que no se enrolla en conversaciones ni descripciones que no aportan, sino que va al grano, a lo que importa. Que sea corta no le quita esencia más bien mantiene el misterio hasta la última página. Y al final viene el giro que cambia todo y te da la solución a los casos. Un giro que está poco visto y que volviendo a repasar el libro está muy bien llevado.
🕵🏼Es un libro que te permite ir descubriendo poco a poco los asesinatos, las historias de los vecinos, y eres un investigador más porque estarás tan perdido como ellos. La ambientación en la época COVID también ha sido un punto a favor, es algo que hemos vivido y le da ese tono asfixiante del confinamiento.
🔝En la sinopsis pone que Lydia se ha inspirado en la novela “Diez negritos” de Agatha Christie pero no la he leído, así que ya tengo otro libro para añadir a mis pendientes.

Pandemia. Una comunidad de vecinos con sus más y sus menos. ¿Qué podría salir mal? Ya os lo digo yo, TODO. Porque si aguantar a nuestros vecinos se convierte en una tortura en muchas ocasiones, imaginad lo que debe ser si alguno de ellos tiene instintos asesinos.

No solo me parece un planteamiento original, sino que nos voló la cabeza con un 𝐟𝐢𝐧𝐚𝐥 𝐭𝐨𝐭𝐚𝐥𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐢𝐧𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐝𝐨 y sorprendente. Da igual las setecientas teorías que inventes, nunca, JAMÁS, serás capaz de adivinar qué demonios está pasando en el Edificio Las Flores hasta que la autora te suelte la bomba.

Una novela disfrutona, corta y que muestra la clara evolución de Lydia respecto a su primera novela, sobre todo en cuanto a la construcción de personajes. Ya estoy deseando leer su siguiente trabajo, que por cierto, ya está en marcha.

Una pequeña maravilla que os recomiendo mucho leer en cualquier rato que tengáis.

Ya conocía a Lydia de su primera obra: Círculos perfectos y allí ya apuntaba maneras. Con El orden de las cosas ya ha dejado claro que el mundo literario debe prepararse 😉

Es una novela muy cortita de apenas 200 páginas que se lee en un suspiro, con un desenlace tan genial que te deja un sabor dulce de felicidad en la boca.

Granada 2020, en plena pandemia. Un edificio, 10 vecinos que comparten aplausos y quizás alguna cosa más aun estando en periodo de aislamiento y restricción. ¿Qué creéis que podría pasar?

Sin duda un homenaje a 10 negritos traído a nuestra realidad actual y a nuestra realidad hace 3 años. Para los aprensivos a leer cosas ambientadas en la pandemia, deciros que simplemente sirve para generar la historia, pero apenas se habla de ella.

Se nota mucho la evolución de Lydia en este libro, es una autora que sin duda está creciendo y aprende de los comentarios de sus lectores.

¡Dadle una oportunidad porque no os va a defraudar!