Entre tanta novela criminal que leo, de vez en cuando me gusta parar y darme un respiro para leer una novela amable y llena de luz. En estos casos, las novelas de Mónica Gutiérrez –alias Serendipia- son un acierto seguro. Hoy os traigo la reseña de la que es su última novela hasta la fecha. Éstas son mis impresiones Abril ha metido la pata en su trabajo. Hasta el fondo. Tanto que no sólo la han despedido sino que es muy probable que la demanden. Su trabajo era todo lo que tenía y está desesperada sin saber qué hacer con su vida. Mientras decide algo su abuela le propone que vaya a pasar una temporada a la casa del pueblo y se ocupe de la biblioteca. Es una solución como cualquier otra así que acepta. En esa casa pasaba sus veranos cuando era niña y le trae gratos recuerdos. El pueblo, perdido en el Pirineo y con muy pocos habitantes, parece un buen lugar para esconderse. El día que se traslada allí le espera una sorpresa: su padre, abogado, lleva a un cliente suyo. Un hombre joven llamado Alex, ingeniero informático, que se ha metido en un buen lío. A Abril no le hace ninguna gracia aunque también es cierto que la casa es enorme y que no tienen por qué relacionarse si no quieren, claro. Pero Alex resulta ser encantador y los jóvenes se hacen amigos. “Club de lectura para corazones despistados” es una novela bonita, sencilla, amable, ingenua, feliz y llena de luz. Una novela “feel-good” en toda regla. Una de esas novelas que sabes que acabarán bien –tienen que terminar bien- , que vas a disfrutar mientras las lees con una sonrisa en los labios y que te dejan buen sabor de boca. Y así es, ni más ni menos. La ambientación es uno de los puntos fuertes de esta y de las demás novelas de Mónica. Todas están situadas en un sitio concreto –casona, librería, biblioteca, hotelito con encanto-, en un pueblo pequeño (o en un barrio concreto) donde todos los habitantes se conocen y forman casi una familia. Lugares con mucho encanto a los que Mónica sabe trasladarte con la imaginación y donde a ti te gustaría trasladarte literalmente. Lo curioso es que la autora lo consigue con pocas descripciones. No sé cómo lo hace pero así es. También los personajes están llenos de encanto. Aquí tenemos dos protagonistas, Abril y Alex. Ambos tienen problemas y ambos van a esa casona de ese pequeño pueblo para esconderse mientras deciden su futuro. Los personajes secundarios –los habitantes del pueblo que forman parte del club de lectura que organizará Abril- son una cucada también. No están perfilados psicológicamente más que en su justa medida (ni la novela lo requiere ni a la trama le hace falta) pero todos ellos se ven como muy reales y, ciertamente, encantadores. La novela avanza a buen ritmo hasta llegar a un final en el que no hay sorpresas pues es el que tiene que ser. Lo importante es lo mucho que se disfruta en ese camino lleno de referencias literarias junto a una taza de té; Earl grey, of course Conclusión final “Club de lectura para corazones despistados” es una novela confortable, cálida, luminosa, amable. Una novela que se disfruta con todos los sentidos, incluso con el paladar. Enlace: http://librosquehayqueleer-l.. + Leer más |