La mejor venganza de Joe Abercrombie
La conciencia es una excusa para no hacer lo que hay que hacer.
|
Calificación promedio: 5 (sobre 446 calificaciones)
/
La mejor venganza de Joe Abercrombie
La conciencia es una excusa para no hacer lo que hay que hacer.
|
La mejor venganza de Joe Abercrombie
Pero las mentiras bonitas siempre vencen a las verdades aburridas.
|
La voz de las espadas de Joe Abercrombie
Cuando hay que hacer algo, lo mejor es no demorarlo para no tener que vivir temiéndolo.
|
La mejor venganza de Joe Abercrombie
La riqueza está hecha de palabras, ideas, rumores y mentiras, porque es demasiado valiosa para quedarse encerrada en el vistoso oro o en la modesta plata.
|
El último argumento de los reyes de Joe Abercrombie
He aprendido todo tipo de cosas de mis muchos errores. Lo único que nunca aprendo es dejar de hacerlos.
|
Mitja guerra de Joe Abercrombie
La muerte nos espera a todos. Nada es para siempre. La vida consiste en aprovechar bien lo que te encuentras en el camino. Si un hombre no está satisfecho con lo que tiene... bueno, muy posiblemente tampoco se quedará satisfecho con lo que no tiene.
|
Un poco de odio de Joe Abercrombie
-Pues no te cases con un idiota. Cásate con algún rico al que le gusten los hombres. Por lo menos, tendréis eso en común. -Miro pensativa al techo-. O como mínimo, cásete con un idiota guapo, y así tendrás algo bonito que mirar mientras lo lamenta. -Ese era tu plan, ¿verdad? -preguntó Savine, dando un sorbo a su propia copa. -La verdad es que sí, pero, cuando llegué al mostrador, solo les quedaba el genio tupido. |
Un poco de odio de Joe Abercrombie
Tenemos que ser vecinos. Podriamos derrochar nuestras fuerzas combatiendo entre nosotros. Derrochar nuestras vidas esperando la puñalada en la espalda, como hicieron nuestros padres tan inteligentes. Pero no somos ellos, somos nosotros mismos, y podemos hallar nuestro propio camino. El Circulo del Mundo es amplio. No van a faltarnos otros enemigos. Podria irnos mejor si combatimos juntos a esos cabronazos
|
Medio Rey de Joe Abercrombie
Yarvi posó de nuevo la mirada en el apuesto cadáver de su hermano, sorprendido por la calma con que su madre era capaz de urdir planes al lado de su marido y su hijo muertos. —¿No lloras por ellos? De pronto un espasmo crispó el rostro de Laithlin, ajó su esmerada belleza, le apretó los labios, le arrugó el entrecejo e hizo sobresalir los tendones de su cuello. Durante un momento horrible, Yarvi no supo si iba a pegarle o a echarse a llorar a lágrima viva, y tampoco sabía cuál de las opciones le daba más miedo. Entonces Laithlin tomo una temblorosa bocanada de aire, devolvió un mechón suelo de su cabello dorado a su sitio y recobró la compostura. —Por lo menos uno de nosotros debe ser un hombre. Y con ese regalo digno de reyes, dio media vuelta y salió de la cámara con la frente bien alta. Yarvi cerró los puños. O más bien cerró uno y apretó el pulgar izquierdo contra el muñón torcido de su único dedo. —Gracias por los ánimos, madre. |
Un poco de odio de Joe Abercrombie
El bien y el mal no son tan faciles de distinguir como parece. La cuestion es sobre todo desde donde miras
|
Gregorio Samsa es un ...