Hermosas criaturas de Kami Garcia
—Eres tú. —¿Qué es lo que pretendías? ¿Matarme? —Eres real. —Sentía las palabras extrañas en la lengua, como si la tuviera llena de algodón. —Pues casi soy un cadáver por tu culpa. —No estoy loco. Creí que me estaba volviendo loco, pero no. Eres tú. Estabas justo ahí, delante de mí. —No por mucho tiempo. —Me dio la espalda y comenzó a andar por la calzada. Ésta no era la manera en que había pensado que nos encontráramos. |