De manera un poco caótica y con un montón de protagonistas repartidos por la historia, nos adentramos en esta novela de fantasía épica humorística. En ella una de nuestras protagonistas, Lídila tendrá que adentrarse en la aventura de cumplir su legado familiar, sin embargo, ella no es un heroína, así que habrá que buscar a alguien. Junto a ella, una espada con mucho carácter y casada de no poder cumplir su destino, Templada, nos contará su percepción de esta locura que supone este viaje a las tierras del Señor del Mal. Un viaje clásico… No obstante, a pesar de todo lo que nos encontramos al principio, donde casi el arriba es abajo y viceversa, nos estamos adentrando en una aventura típica de fantasía heroica. Eso sí, con mucho mucho humor y mucha referencia a nuestro mundo, a referentes literarios y a ideas del común de los mortales. Quizá, por ello, destaca más lo perdida que se encuentra nuestra protagonista ante el papel que le ha puesto el destino, ya que siendo casi una chica de oficina, de burocracias y números, se ve lanzada a los caminos para encontrar un héroe. Porque esto lo tenemos que tener claro, nuestra protagonista ni se piensa serlo, sino que delega en otros personajes toda la «movida» que supone el viaje heroico. Aquí tocaría hablar de los personajes, pero me lo he pasado tan bien encontrándome con ellos y conociéndolos que solo os diré que son el acompañamiento perfecto a este tipo de protagonista. Junto a ellos y, en muchos casos, por ellos, nos adentraremos en los escenarios típicos del género así como en los nudos habituales: duelos, bosques encantados, dragones, puentes, acertijos. … con cositas que conocemos Sin embargo, no podríamos tener una novela de humor si nuestro mundo no apareciera más que en referencia. De este modo, podremos encontrar quizá a los Power Ranger, Hagstags, anuncios de buscar trabajo a lo Instagram y alguna cosilla más. Estas menciones o incorporaciones narrativas nos permiten meternos en la historia y a la vez deslocalizar la cuestión para poder mirar desde una visión crítica algunos temas: la religión, las citas a ciegas, la desidia actual por complicarnos la vida, etcétera. Esto sumando a los personajes que os mencionaba más arriba, hace que estemos ante una novela que engancha tanto como aturde, ya que la locura e irreverencia nos hace reír a la vez que decimos «un momento…». Quizá esto último me ha ralentizado un poquito porque, sobre todo al principio hasta que entrado en la novela, ha habido momentos que he tenido que releer para quedarme bien con lo que decía. Particularmente, no lo achaco a un problema de estilo, sino a cómo entramos en la dinámica. Esto lo digo, porque a nivel de estilo me ha gustado mucho la expresividad del lenguaje, con la que se ha definido muy bien a los personajes, y las descripciones que permitían entender mejor las extrañas situaciones que vivía la pobre (o no) Lídila. Me reafirmo Como decía un poco más arriba, me gusta mucho la fantasía de humor y, en ese sentido, esta lectura ha sido un acierto para mí porque divierte mucho, entretiene y, además, te da otra perspectiva de algunos de los clichés de la fantástica heroica. Si os apetece una lectura rápida, divertida y un poco hilarante y desconcertante, os animo mucho a lanzaros a esta novela. No creo que os decepcione y, en cualquier caso, si no le sacáis más jugo, al menos os lo habréis pasado bien. Espero que os animéis con ella. Enlace: https://ellibroenelbolsillo... + Leer más |