La sonda del viento de Enfermera Saturada
No sería justo que dejase de hablar de los frascos sin hacer una mención especial a la mujer que un buen día nos trajo su orina dentro de un fresquito de perfume que tenía forma de flor.
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La sonda del viento de Enfermera Saturada
No sería justo que dejase de hablar de los frascos sin hacer una mención especial a la mujer que un buen día nos trajo su orina dentro de un fresquito de perfume que tenía forma de flor.
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
El humor resulta muy hermoso, y a veces con amoxicilina no basta, el cuerpo se cura pero el alma sigue rota. La risa nos acerca a las personas, y los pacientes los hace emocionalmente fuertes y libres para decidir cómo afrontar su dolor.
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
Sin duda, en mi historial de personas que creen que la ^H^ de la entrada es de Hotel y no de Hospital, y que la pulsera en la muñeca con sus datos es como llevar la del "todo incluído", el récord absoluto lo ostenta una mujer de sesenta años que, sin dudarlo, pulsó el timbre a la una de la madrugada...
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
No es fácil encontrar a una persona que entienda que los turnos de mañana, tarde y noche organizan nuestra vida
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El silencio de los goteros de Enfermera Saturada
La planilla de turnos del hospital es como el casino: la casa siempre gana
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Orgullo enfermero: Ni héroes ni villanos, lo que siempre fuimos de Enfermera Saturada
La enfermería es como una manía, una fiebre en la sangre, una enfermedad incurable que una vez contraída no se puede curar. Si no fuera así, no habría enfermeras.
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El guardián entre el ibuprofeno de Enfermera Saturada
Si en uno de esos cuestionarios me preguntasen por mi vida sentimental, pondría algo así como: Utilizo los geles de placer efecto calor para calentarme los pies
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
Porque a los sanitarios nadie nos prepara para sobrellevar el dolor ajeno, ni para trabajar con la muerte cara a cara.
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
Ahora, echando la vista atrás, me doy cuenta de que me hice mujer en los pasillos de un hospital.
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
No hay nada como volver a un lugar que apenas ha cambiado para darte cuenta de todo lo que has cambiado tú.
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
Cada uno es libre de arruinar su vida como quiera, y algunas nos hacemos enfermeras.
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Suero de una noche de verano de Enfermera Saturada
Está claro que hay personas que pasan por tu vida para enseñarte todo lo que no hay que hacer, y él era una de ellas.
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Orgullo enfermero: Ni héroes ni villanos, lo que siempre fuimos de Enfermera Saturada
"... la única vacuna mala, es la que rechazas ponerte".
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Las uvis de la ira de Enfermera Saturada
Ya de por sí abandonar tu país es duro, dejar atrás a tu gente para tratar de encontrar un empleo o una estabilidad profesional que las políticas laborales y sanitarias de tu país no te permiten alcanzar, en ocasiones quienes más palos en las ruedas te ponen no son los habitantes del país que te recibe si no tus propios compatriotas.
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Gregorio Samsa es un ...