Vinland Saga nº 08

Aviso: esta reseña contiene spoilers de los anteriores tomos de esta apasionante y épica aventura vikinga. En este manga acompañamos a Thorfinn en su camino por redimir el honor de su familia buscando vengar la muerte de su padre.

Una vez llegan a York, Knut planea un golpe de Estado con el asesoramiento de Askeladd. Pero en el banquete, las cosas van mal. Sven, consciente de la ambición de su hijo, plantea un ultimátum a Askeladd: El país de Gales o Knut. de esta manera, si Askeladd no le sirve la cabeza de Knut, Sven enviará su armada a la tierra de sus antepasados. Acorralado, Askeladd toma una decisión que cambiará no sólo la vida de Thorfinn, sino también la de toda Europa.

Si ya el tomo anterior parecía un punto de inflexión para la historia, este rompe todos los esquemas. Por primera vez vemos a un Askeladd acorralado e indeciso, mostrando incluso temor, a pesar de que en todos los anteriores momentos de tensión siempre logró mantener la cabeza fría. Su decisión final no solo demuestra el complejo y magnífico personaje que es, sino que enseña por fin la verdadera cara de un hombre al que parecía no importarle nada.

Thorfinn permanece ajeno a todo lo que ocurre en el interior del edificio por su decisión de no acudir al banquete. Sin embargo, todo lo que sucede acaba repercutiendo en su vida de manera decisiva y será el golpe necesario para su renacimiento. Algo parecido se puede decir con Canute, pues aquí se decide su destino.

Este tomo rompe los esquemas y acaba transportándote varios años al futuro, dejándote en vilo con lo acontecido en ese lapsus temporal. de esta forma, logra dejarte con muchas ganas de seguir leyendo para descubrir el porqué los personajes se encuentran esa situación y qué a ocurrido con el resto.

Irbis.