Canto yo y la montaña baila

Canto yo y la montaña baila. de verdad que no podría haber un título mejor para este libro. Porque Irene canta su canción, entreteje las palabras como música, y toda la montaña baila. O puede que sea el propio paisaje es que está cantando, porque aquí todos tienen voz. Las nubes llenas del agua de lluvia, los corzos, las setas, los que ya no están, cada habitante de esta montaña canta su canción, con voz propia, y es tan real que te la crees, te metes en su piel y sientes lo mismo que ellos. Yo no sé mucho de poesía pero algunos capítulos están escritos de una forma tan bonita que me lo han parecido. Como relatos independientes que al principio no entiendes bien pero que poco se poco se abren paso en tu mente y de repente todo cobra sentido. Y todo es la misma historia, la canción de la montaña.

La verdad es que nunca había leído un libro así, tan diferente, tan original. Me ha sorprendido mucho. Quizá, y esto ya es cosa mía, me habría gustado conocer un poco más de algunos personajes, se me ha hecho corto y a veces sentía que cambiaba de "relato" demasiado pronto. Pero dejando de lado esta impresión totalmente subjetiva es innegable que Irene ha creado algo mágico.

¿Os ha pasado alguna vez eso de leer un libro, que os encante y no saber cómo expresar todo lo maravilloso que os ha parecido? Porque a mí me está pasando justo ahora. Me resulta casi imposible describir con palabras la belleza que se esconde entre las páginas de este libro, y es que Irene Solà escribe tan bonito que se te encoge el corazón. Y no sólo eso, es que además tiene una capacidad de narrar desde varias perspectivas y personajes que son muy diferentes unos de otros, y da igual si escribe desde el punto de vista de una nube, o de un corzo, o de una bruja, o de una niña o incluso de una seta, da igual porque todo lo que escriba tiene sentido y resulta precioso. Todos estos elementos están relacionados entre sí, y sus relatos conforman esta historia que no es más que la vida en sí misma.

Me ha parecido una lectura mágica, y ya sé que sólo estamos en enero, pero me atrevería a decir que va a ser una de mis mejores lecturas de 2020. Os animo a que le deis una oportunidad porque de verdad creo que merece la pena. Irene Solà ha sido un verdadero descubrimiento y una autora a la que seguro que seguiré la pista.