17 Pies

7/3/24
Nuevo autor ,y buen descubrimiento.
La historia nos cuenta la investigación del FBI de un allazgo en un pueblo de Dakota del Sur.
Un agente apunto de jubilarse y natural del pueblo,y la novata de la oficina ,ya que nadie acepta el caso ,no por la envergadura sino por la pareja de baile.
Total que la novata acepta el caso,y además estará al mando .
El allazgo es 17 pies humanos cortados ,encontrados por una perra en un día de pesca.
Pronto la agente irá conociendo a los habitantes del pueblo y sus historias,historias que afectan también a su compañero,a medida que los forenses van descubriendo evidencias.
Ritmo de investigación pausado,ya que se enfoca más en las historias personales,y sólo al final se acelera todo bastante como suele ser habitual.
Bastante contento,tanto que leeré más del autor.Ademas no descarto más historias de la protagonista ,aunque eso sólo lo sabe el autor.
Recomendado,diferente historia,siempre es bueno encontrarse un caso muy diferente en este género.
Muchas gracias.

Jessie es nueva en la oficina del FBI en una pequeña ciudad de Dakota del Sur. de pronto, y de rebote, se convierte en la responsable de un caso en el que han aparecido 17 pies en la vera de un lago en un minúsculo pueblo a tres horas de la ciudad.
Casualmente, su compañero de investigación es oriundo de ese pueblo y este va a ser su ultimo trabajo.
Cuando llega al pueblo se encuentra con 17 pies y ninguna pista por la que tirar, aunque poco a poco y con la ayuda de Tom, su compañero, van intentando acotar las posibilidades para encontrar al asesino o al menos averiguar a quien pertenece cada uno de los pies.

La novela es entretenida, se lee muy bien, es ágil y con capítulos cortos. Los personajes no son demasiado profundos, Jessie está bastante perdida en la investigación y depende demasiado de las directrices de su compañero, es comprensible al ser su primera investigación, pero queda demasiado insegura para haber sido la primera de su clase. Tom es genial, es toda una institución, pero felicita demasiado a Jessie para mi gusto.
Creo que las partes en las que Dan y Jessie interactúan quedan un poco forzadas. Sin embargo, las de la madre de Jessie son una maravilla y dan un toque de luz y alegría a toda la novela.

La investigación es interesante y puedes llegar a dudar de varias personas del pueblo, pero lo más sorprendente es un detalle del final que me ha encantado.

La novela es sencilla pero entretenida y te hace pasar un buen rato.

Diecisiete pies han aparecido en un pequeño pueblo; una simpática perrita se los ha ido llevando a su humano como si fueran un obsequio o un trofeo de caza y a partir de ahí el lío está servido.
Al frente de este caso que ha revolucionado al pueblo entero ponen, quizás, a la peor pareja posible: una agente recién salida de la academia y un agente al que le quedan unos días para jubilarse. Pronto nos daremos cuenta de que hacen muy buen equipo y están dispuestos a todo con tal de encontrar al culpable y dar solución al caso que plantea una serie de interrogantes bastante inquietantes: un pueblo pequeño en el que cualquiera puede ser sospechoso, 17 piezas de un rompecabezas que hay que montar y la presión de una rápida y eficaz resolución planean sobre la cabeza de una agente que ve una gran oportunidad y de otro que ve el broche de oro a su carrera.
Un libro en el que la ambientación es bastante lóbrega y gris, algo muy acorde a lo que se van contando y que, aunque no se indique de manera explícita, se deja entrever, y los personajes están bien perfilados: un veterano que guía a una novata con el aplomo que le han dado todos los años de experiencia a sus espaldas y el haberlo visto casi todo y una novata que se deja aconsejar pero, a la vez, toma la iniciativa y va aprendiendo poco a poco las artes del oficio.
El suspenso se mantiene hasta casi el final porque apenas hay pistas que seguir; se basa todo en prueba y error, en ir jugando con lo poco que tienen sin que se note mucho y en tirar por las escasas vías que se abren ante ellos. La narración es ágil, hay cambios en el ritmo cuando aquella así lo requiere: algunas descripciones, momentos más intimistas, pero luego vuelve a saltar a la carrera cuando se produce algún avance en la investigación o se ha encontrado una nueva pista. Todo queda bien cerrado y explicado al final de manera coherente.
Lo único que no me ha gustado es el exceso de oraciones seguidas separadas por comas; si bien esto hace que la lectura sea más ágil que cuando se utilizan las subordinadas a discreción, en ocasiones entorpece un poco la lectura. Sin embargo, el libro y la historia bien se merecen una oportunidad para saber qué se esconde detrás de esos pies.

Después de leer El oro de Hitler había que leer la nueva historia de J.F. Sánchez17 pies.

Sí, ese es el título. Y, si con eso ya llama la atención, es empezar a leer y no poder parar. Ni una meta he respetado, aún no hemos empezado a comentar y ya lo he terminado.

Desde el principio te atrapa. Pero claro que, de pronto, aparezcan 17 pies sin más rastro que ese y que del caso se encarguen una novata y un agente a punto de jubilarse no es algo que se pueda dejar así como así y no avanzar más 🤭🤭.

Nuestros protagonistas llegarán a Oldham dispuestos a cerrar el caso lo más pronto posible. Dos agentes muy distintos, pero que pronto nos demuestran que forman un gran equipo. El viejo inspector a vuelta de todo que aconseja a la novata y la agente inexperta que aprende a llevar la batuta sin menospreciar al veterano.
Encontrar la solución no es fácil. Conforme avanza el caso se abren más interrogantes y todo el mundo empieza a parecer sospechoso. Cuando alguna respuesta aparece, se abren otras preguntas que hacen que el suspense no decaiga en ningún momento. Ni el suspense ni las dudas. Porque no hay pistas que te lleven a poder adivinar quién o quiénes hay detrás de esos 17 pies.... Yo llegué a sospechar de todo el mundo y, aún así, me sorprendió la resolución 😉😉.

Una historia adictiva y que se lee súper rápido, totalmente diferente a la anterior, por si os lo estabais preguntando 😉. Eso sí, si os gustó como resuelve los misterios el padre Ramón, tenéis que ver cómo lo hacen Tom y Jess.😉😉

Un misterio difícil de resolver. En el que lo único que se tiene de las víctimas son los pies. En concreto 17 pies. Un caso de lo más extraño. Jessi Carlsson una joven agente del FBI será la encargada de investigarlo junto al veterano agente Tom Wilson, que se encuentra a días de jubilarse. Para ella sería su primer caso y para él el último. ¿Serán capaces de descubrir quién lo ha hecho y por qué motivo?

La historia está narrada en primera persona principalmente por Jessi y por Tom.

La narrativa de la historia es adictiva, es difícil dejar de leer. Además, al contar con capítulos muy cortos la lectura es muy dinámica.

La novela se centra sobre todo en los personajes más que en la propia investigación del caso. Y creo que es todo un acierto.

Los personajes de la novela me han gustado mucho. Me parece muy interesante el tándem que se forma entre Jessi y Tom. al mezclar veteranía con juventud se complementan a la perfección. También destacaría a la madre de Jessi. Otorga a la historia situaciones muy cómicas que ayudan a quitar un poco de tensión a la historia.

El autor es capaz de crear de manera magistral un ambiente sombrío, oscuro absolutamente apropiado para la historia que nos quiere contar.

La intriga se mantiene durante toda la novela, ya que a lo largo de la misma el autor no nos da muchas pistas sobre el caso. Haciendo que el lector sospeche de todos los personajes en algún momento.

La resolución del delito queda totalmente cerrada. Y desde muy punto de vista el final es totalmente acertado.

Como conclusión, es un libro al que no puedo poner ninguna pega. Por lo que no puedo hacer otra cosa que recomendarlo.