—Dime, ¿tienes miedo? —No —se apresuró a contestar. Aunque, por supuesto, mentía. —Deberías —advirtió la voz— Es un sentimiento muy humano, concebido para la preservación de la especie. Sin miedo, no llegarás muy lejos. |
—Dime, ¿tienes miedo? —No —se apresuró a contestar. Aunque, por supuesto, mentía. —Deberías —advirtió la voz— Es un sentimiento muy humano, concebido para la preservación de la especie. Sin miedo, no llegarás muy lejos. |
Y el Gólem se retorció, temeroso, arrancando de su cuerpo sonoros crujidos. Pero casi al instante, sacó sus ancestrales raíces del suelo, y empezó a andar con dificultad a través del bosque hacia mil nuevas aventuras |
Sostenía un par de viejísimos muñecos en las mano a los que manejaba con entusiasmo en el interior de una vieja caja de zapatos. Uno de ellos tenía atado un diminuto martillo en la mano, y en la otra portaba un pequeño clavo, alargado y puntiagudo. Un pequeño recipiente volcado tenía aún restos de agua, al lado de unos algodones pintados de rojo y amarillo.
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El puré podía tener un gusto nefasto, pero tenía una cualidad fascinante: Era como el barro, pero más consistente, y le gustaba pasar el cubierto por encima y hacer surcos, primero en un sentido y luego en otro. |
Mirarlo directamente suponía quedarse ciego.
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Novela de ciencia ficción, escrita por Richard Matheson, en 1975 se titula: "En algún lugar del _________"