Concilio de sombras

Soy Delilah Bard, pensó mientras las sogas le rasgaban la piel. Soy una ladrona, una pirata y una viajera. Pisé tres mundos diferentes y sobreviví. Derramé la sangre de miembros de la realeza y sostuve magia en mis manos. Un barco lleno de hombres no es rival para mí. No os necesito a ninguno. Soy única, maldita sea

Soy Delilah Bard. Pirata, ladrona, maga. He cruzado mundos y abordado barcos. He luchado contra reinas y salvado ciudades. Soy única en mi especie.

Todos estamos aquí por una razón. Algunas razones simplemente son más grandes que otras. Así que supongo que no tengo miedo de quién eres o, incluso, de lo que eres. Tengo miedo de por qué estás aquí.

La política es una danza hasta el momento en que se transforma en guerra. Y nosotros controlamos la música.

Las ideas son buenas y grandiosas, pero las realidades pueden ser... menos placenteras.

La magia y el mago deben equilibrarse entre sí. La magia en sí misma es caos. El mago debe ser la calma.

He descubierto que observar es la manera más rápida de aprender y la forma más segura de mantenerme viva.

La fortaleza y la debilidad son cosas enmarañadas. Se parecen mucho, solemos confundirlas, de la misma manera en que confundimos magia y poder.

La magia es todo y nada. Es vista, gusto, aroma, sonido y tacto, pero también algo completamente distinto. Es el poder en todos los poderes y, a la vez, es ella misma. Y una vez que sepas cómo sentir su presencia, no estarás nunca sin ella.

Todos creemos en lo mismo, en realidad, solo le damos nombres distintos.