GIANT DAYS 12

Estamos llegando al final de esta serie de cómic. Y aunque me alegro por saber como terminará la aventura de las tres amigas. También me da pena abandonar sus vidas. 

En este número vemos como Susan se plantea más aficiones para su nueva vida, ya que ella se ve "encerrada" en una vida de cenas con amigas con pareja, hacer cosas del hogar, etc. Y se ve que todavía quiere seguir teniendo su esencia... Así que ayuda en la tienda de cómics donde trabaja Esther porque están sucediendo una serie de robos. Es muy divertido el tono de narración al más puro estilo novela negra con detective. Además de este tema toca problemas más serios con la novia de Ed que tiene serios problemas con el alcohol y pone a prueba su relación. 

Luego está el desternillante capítulo donde Daisy aprende a conducir. No puede existir una persona tan torpe para conducir. Y luego el tema de que muchas personas están sustituyendo la maternidad/paternidad por mascotas. Y se dan cuenta que es igual de estresante de cuidarlos. 

Para terminar, el capítulo final de este tomo nos muestra la boda del hermano de McGraw. Aquí podemos ver esa presión social de cuándo llegará la siguiente boda familiar y las correspondientes preguntas de futuro. Lo cual pone a Susan en un ataque de pánico sobre su futuro. 

Estas historias además de tocar temas con los que sentirse identificados, nos muestra las realidades de nuestra sociedad. Todas esas incertidumbres que nos embarga a los jóvenes y no tan jóvenes tras el paso por la universidad y adentrarnos en la vida adulta. Pero lo bueno de este cómic es que le ven el lado divertido, le quitan hierro al asunto para que no de tanto miedo a sus lectores pero al mismo tiempo se vean reflejados en las historias.

En conclusión, un penúltimo tomo en el que las protagonista se van adentrando más y más en su futuro incierto de la vida adulta tras la universidad. Espero que el final no sea muy desalentador y siga manteniendo su tono ácido.
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Por otro lado, en Giant Days 12 tenemos otro momentazo se estas jóvenes alocadas y extrañas que siempre me hacen reír. Daisy intentando conducir y siendo un desastre ha sido divertidísimo. Desde luego esta colección de novelas gráficas me apasiona, están llenas de humor, situaciones cotidianas y locuras que todos vivimos a diario pero llevadas al humor. Os los recomiendo muchísimo.