Esta novela es más en todos los sentidos que la primera parte. Maxinne está dolida por como terminó el libro anterior, así que está dispuesta a pasarlo bien cuando de casualidad Rob Boy entra en su vida real. Entre ellos se crea un vinculo y una amistad con mucho roce difícil de obviar. Se acerca la semana de BDSM de Acapulco que organiza el Vesper's y a la que Bob Boy va siempre, en la edición Acapulco, las normas cambian, pero eso a Maxinne no le importa si puede encontrar a quien está buscando. A quien no se espera encontrar y a quien no le pasa ni una es a Hurricane que más que nunca tiene fijación por Maxinne, pero que al mismo tiempo continua apartando de su vida, hasta que no le queda más remedio que meterla a ella y a otros participantes en el centro de su trabajo. Y en el punto de mira de todos se encuentra El Diablo, un personaje supercarismático al que hay que sacarle mayor provecho porque puede dar mucho juego. La novela vuelve a ser altamente adictiva, con más escenas de alto voltaje, más peleas, más acción y más amor, de todo tipo. Es una novela más emocionante y completa que la primera, que te lleva de un estreno a otro y que termina con cierto sabor agridulce, ya que Magnus es mi personaje favorito y no me gusta como queda al final del libro. + Leer más |