El príncipe y la bruja : romance y fantasía

Había una vez…

Un príncipe valiente, que sobre su blanco corcel combatía el mal y la injusticia.

Una princesa de cabellos de oro y ojos como pedazos de cielo que esperaba.

Un escudero fiel que siempre estaba al lado de su señor.

Y una bruja hermosa, oscura y peligrosa que gobernaba un reino donde había un bosque sediento de muerte y sangre…

El principie Azlan ha sido criado para ser todo lo que se espera de un buen príncipe. Por eso cuando la malvada reina Danya amenaza su reino, rápidamente se pone a la cabeza de la delegación que parte hacia el castillo de la bruja para parlamentar con ella. Cual no será su sorpresa cuando en lugar de encontrarse a una horrorosa vieja, se encuentra con una hermosa y joven mujer que le encerrara en su castillo como rehén. Aparentemente condenados a ser enemigos acérrimos, entre Azlan y Danya, entre el príncipe y la bruja, surgirá una relación que tambaleara los cimientos de sus mundos y sus creencias. Bajo la amenazante sombra de un bosque oscuro, maldito y hambriento y poblado por terribles criaturas ; dispuesto a atrapar a cualquier incauto que se acerque a él.

Si hay algo que siempre me tirara serán las historias con ambientación y referencias a los cuentos de hadas, es algo que me encanta. Solo con eso la novela ya me tenía totalmente conquistada desde antes de leerla. Muchas gracias a @tsanya por darme la oportunidad de leer su trabajo y por el envío de un ejemplar electrónico del mismo. Desde que leí su sinopsis, supe que iba a disfrutar particularmente de esta lectura. Y así ha sido.

De la mano de tsanya nos adentraremos en el lado más tenebroso del “Erase una Vez”, uno en el que las brujas y los príncipes no tienen por que estar destinados a combatir, los bosques no son lugares idílicos y las princesas pueden ser tan peligrosas y oscuras como cualquier hechicera. No estamos en una historia de Disney, y esa es la gracia de la obra (y también aquello que más he disfrutado de ella, y que es lo que buscaba cuando la empece, para que mentir), su ambientación fantástica y la forma en que la autora usa, cambia y retuerce los tópicos de los cuentos de hadas para crear una historia oscura y tenebrosa. He disfrutado mucho de todas las referencias a cuentos de hadas, tanto a lo largo de la historia como en los títulos de los capítulos. La ambientación está estupendamente conseguida. Las descripciones son muy, muy detalladas, pero sin resultar pesadas para nada. El equilibrio entre dar detalles, ser minuciosa y no saturar está más que conseguido en todo momento. Tsanya lo mismo te lleva a un castillo de ensueño que a un bosque tenebroso y peligroso, logrando que en todo momento puedas hacerte a la idea de que estas en ese lugar. Las escenas que tienen lugar dentro del bosque son pavorosas, es increíble, la forma en que la autora lo convierte en una entidad más dentro de la historia, una entidad oscura, hambrienta y peligrosa. Consigue que de miedo del bueno, autentico pavor. Mientras lee, uno puede sentir como el bosque es una autentica y pura bola de maldad que no para de moverse y de maquinar, ansiosa de sangre y muerte e imposible de destruir. Una autentica pesadilla hecha realidad. Quizás si hubiera leído esta historia de buenas, esa ambientación del bosque me hubiera impactado mucho más. Pero me ha recordado mucho a lo que ya hace unos años leí en esa maravillosa novela autoconclusiva que es “ Un Cuento Oscuro“ de Naomi Novik (que si no habéis leído os recomiendo totalmente), donde el bosque es también un ser con identidad propia y mucha oscuridad.

A nivel narrativo, lo mejor de todo es que dentro de la trama es que nunca dejan de suceder cosas, a los personajes no paran de pasarles todo tipo de situaciones. Eso hace que todo sea muy adictivo y que el interés nunca llegue a decaer durante toda la lectura. al principio, la forma en que la obra estaba narrada se me hizo un tanto pesada y me impidió conectar del todo con los personajes con la trama. Pero a medida que fui acostumbrándome y adentrándome más en la historia, empecé a disfrutar también este aspecto. La autora tiene una forma de escribir muy atmosférica, y que se centra mucho en los sentimientos de los personajes y en la sensaciones, de ahí que se necesite un poco de tiempo para poder adentrarse en esa pluma. Pero gracias a ello, Tsanya nos regala momentos en los cuales uno puede sentirse totalmente partícipe del entorno y de la escena que se está desarrollando ante sus ojos. Es increíble la forma en que la autora logra meterte en lo que está contando, Cómo logra ponerte en la piel de sus protagonistas, casi como si estuvieras dentro de su mente, la forma en que se describen las sensaciones tiene un algo que te da la impresión de que puedes hasta tocarlas. Y hay escenas en las que uno puede notar los escalofríos subiendo por la espalda mientras la piel se le pone de gallina.

Todas maneras, no podemos olvidar que esta no es solo una historia de fantasía, también lo es de amor. En cierto modo, esta novela puede entenderse como una reinterpretación oscura del cuento de “La Bella y la Bestia”. En esta ocasión, la bestia es una mujer oscura y hermosa. Danya es una autentica bruja de cuento con una terrible reputación, a sus espaldas, y un secreto tan pesado como oscuro. Mientras que el héroe se convierte aquí en la damisela encerrada en el castillo. Azlan es el típico príncipe de cuento, valiente y bondadoso, siempre dispuesto a hacer lo correcto. Ellos son la noche y el día, las dos caras del cuento, planetas que deberían haber estado destinados a no encontrarse nunca. Y ahí radica la belleza de esta historia, en lo bonito que es leer el arco evolutivo de los personajes, la forma paulatina y creíble en que esto es llevado por la autora. La manera en que la una y el otro, siendo tan diferentes como la noche y el día y destinados a ser enemigos; se retroalimentan mutuamente, sacan al otro de su zona de confort y le obligan a crecer y a cambiar da lugar a una relación llena de contrastes y muy interesantes. A lo largo del libro pasan por todo tipo de situaciones y malentendidos entre ellos, dando lugar a una historia dinámica, llena de momentos tristes, pero también divertidos. Y románticos. Y que se va cociendo poco a poco, a fuego lento, pero con buen ritmo. Y que además les obliga a evolucionar, no solo como pareja, sino individualmente. Hazle empezará a cuestionarse todo aquello que siempre ha dado por seguro, a darse cuenta de que tiene más fallas de las que él pensaba y de que a su alrededor hay muchas más cosas. Eso convertirá al príncipe azul en un auténtico humano, con sus luces y sus sombras. Es cierto, que es un personaje muy interesante. Pero si hay alguien que se roba la escena cada vez que aparece es Danya, la gran protagonista de la historia. La bruja es tan oscura e implacable como la pintan, ha conseguido una fama a la que hace justicia. Pero eso no quita para que haya una explicación que justifique como ha llegado a ser lo que es. Es un personaje duro y fuerte porque no le ha quedado otra, con muchos matices, capas y vértices. El que poco a poco se vaya esclareciendo mucho de los misterios que hay en torno a su persona, como la forma en que a los ojos del lector( a la vez que a los de Azlan) el personaje va abriéndose, demostrándose como más humano, débil y tan necesitado de afecto y comprensión como cualquiera.

Me gustaría señalar un cuidado similar en los arcos evolutivos de todos los personajes. Durante la mayor parte de la novela he sentido que el personaje de Renzo realmente no pintaba nada, no es hasta el final cuando su arco dentro de la historia se perfilaba de forma solvente, y que el personaje resultaba, por fin, realmente importante y con un fin dentro de la historia. Y es una pena que por eso el escudero del príncipe me haya dejado el gusto de ser un personaje bastante desdibujado. Creo que si se le hubiera dado más protagonismo dentro de la trama y se hubiera incidido más en su relación con Azlan hubiera sido un carácter muy interesante, porque carisma y elementos para serlo no le faltaban. Pero al menos no le ha pasado lo mismo que al personaje de la princesa, Lis. Me ha dado mucha pena, porque creo que está muy mal aprovechado. Lo peor del caso es que tiene un arco evolutivo y una historia de fondo muy interesantes dentro de lo que es el conjunto global de la novela. Me ha impresionado mucho que la autora nos demuestre como el personaje va cambiando y pasando de ser una princesa arquetípica de cuentos de hadas, a una mujer mucho más oscura, liberada y que, en cierta forma, da hasta miedo. Y todo eso para que al final prácticamente no haga nada en lo que es la historia. Creo que podría haberse sacado mucho más jugo a toda esa evolución tan oscura y que la autora sabe llevar tan bien cuando le dedica tiempo, siento que han quedado de ella muchas cosas en el aire al final de la novela. Casi parece que está ahí de adorno más que cuando era una simple y bella princesa.

Aunque el ritmo narrativo me ha gustado la mayor parte de la lectura, que solo lo he disfrutado realmente en el último cuarto, cuando las cosas se vuelven más y más trepidantes y la tensión, las esxenas sangrientas y la adrenalina recorren libremente las páginas del esta historia. Y echo en falta que hubiera habido un poco más de agilidad en el resto de la novela. No niego que desarrollar la relación entre Azlan y Danya se merece su tiempo y su mimo, que es algo necesario. Pero me hubiera gustado que en ciertos momentos subiera apretado, un poquito (un poquito, nada más) el acelerador, que las cosas hubieran ido un pelín más rápido. Creo que eso hubiera aportado mucho más dinamismo a la lectura. Aunque para mí lo peor ha sido que en muchos aspectos la historia del fondo de Danya se me ha quedado muy escueta y me ha parecido que no estaba del todo desarrollada. Hay ciertas cosas que no me han quedado claras, y otras que me han parecido poco exploradas. Y es una pena, no solo por la (obvia) importancia que tiene tanto para el personaje como para todo el argumento. También porque creo que ciertas cosas de ese pasado hubieran aportado mucho más juego dentro del libro si se hubieran trabajado.

Si algo nos demuestra “El Principe y la Bruja” es que siempre se puede ir más allá. Las convecciones preconcebidas y las aspiraciones que los demás tengan respecto a nosotros no pueden ser lo que nos definan. Raramente lo hacen, y si lo consiguen es porque nosotros las aceptamos dócilmente cuando se pueden traspasar. El “Y vivieron felices y comieron perdices” no siempre marca el premio tras toda una serie de pruebas. La novela no es un idílico paseo por el bosque, ni mucho menos. Es una historia oscura, a ratos escalofriante, llena de sangre y muerte. Y también de crecimiento, empatía y amor. Que nos presenta a dos personajes que no son conscientes de sus fallas hasta que se rompen y se complementan al conocerse. Una historia agridulce en la que el amor, la pasión y el miedo se dan de la mano en una ambientación dark fairy tale.

La portada ya me tenía 🥰🥰 y si a eso le sumamos que un príncipe azul pueda tener algo con la bruja del cuento... ¿quién se puede resistir? 😜

Nos encontramos ante una historia que no es la común, el príncipe es el que debe matar a la bruja para salvar a la princesa, ¿verdad? Pues en esta historia puede que alguna que otra cosa cambie… 😜

Un príncipe que se ve atrapado en el castillo de una bruja, que se da cuenta de que ha vivido siempre en una burbuja ajena a la realidad, haciendo lo que se espera que haga y no lo que realmente quiere hacer…

Una princesa que decide no seguir esperando sin hacer nada, que es capaz de plantarse sola en el castillo para pedir que liberen a su príncipe, aunque quizás la que necesita ser libre sea ella…

Un guardia que daría su vida por proteger la del hombre al que ama en secreto…

Una bruja que bajo su mirada de hielo guarda mucho fuego, que sabe que su destino está escrito y solo está esperando el momento de que llegue…

Un bosque que esconde muchos secretos, que tiene alma y que quiere seguir creciendo y para eso necesita tener más poder…

¿Recomendamos?

Si te gustan los libros oscuros este sin duda te atrapará, ya que ese bosque es de los que enconden mucha mucha oscuridad…

Nos ha encantado ir viendo toques de prácticamente todos los cuentos de Disney, muy bien enlazados dentro de la
historia.

Las brujas no tienen finales felices…

¿Tú qué opinas?

No queremos contar más para no dar más info de la necesaria, cuando lo leas escríbenos y lo comentamos 😜.

El año pasado pude leer los dos libros anteriores de la autora y la verdad es que me encantaron, y cuando me ofreció leer este no me lo pensé dos veces. Un libro autoconclusivo de fantasía con romance.
Comienza con aires de cuento clásico, donde un reino gobernado por una malvada bruja quiere apoderarse de las tierras de los reinos vecinos. Y un valiente príncipe azul decide ir a plantarle cara. Lo que pasa es que la bruja no parece una bruja. Y la princesa de esta historia intentará salvar al príncipe azul que ha caído en las crueles manos de la bruja.
Es un libro donde encontrarás el punto de magia y terror, que le da el toque gótico a la historia. Además hay amor.
Siento que la historia podía haber avanzado mucho más rápido. Entiendo que de esta forma, consigue que sientas más miedo por lo que ocurre en el castillo y en el bosque, pero se me ha hecho lento.
Como que la trama principal, que era la de la bruja y el príncipe quedase en segundo lugar, que no avanzase.
En general la idea me ha gustado, tenebrosa, con magia y romance, pero lenta.

El príncipe y la bruja llegó a mis manos gracias a la colaboración con su autora, ya que se puso en contacto conmigo para ver si me animaba a leer su libro y ¿cómo decirle que no después de saber que era un libro autoconclusivo, que además se podría decir que es un retelling oscuro de la bella y la bestia?

O por lo menos esas son las vibes que me dieron a mí cuando lo estaba leyendo. Si hay algo que me ha gustado especialmente de este libro ha sido ese corte oscuro que rodea a los protagonistas, sobre todo a Danya,

Me gusta que la autora juegue con esa doble moralidad de los cuentos de hadas, y es que ¿dónde está escrito que realmente deba de haber alguien malo? ¿Por qué la bruja tiene que ser la mala siempre? ¿Qué pasa con el príncipe azul?

Pues todos esos dilemas y estereotipos los podéis encontrar entre las páginas de este libro y eso ha sido un punto a su favor, ya que lo hace totalmente impredecible y nunca sabes qué va a suceder a continuación.

Y aunque ha sido un libro que me mantuvo enganchada desde la primera página, también es cierto que en algunos momentos es algo lento, aunque entiendo los motivos de que la autora lo haya hecho así.

Los dos protagonistas me han gustado mucho, aunque en esta ocasión me decanto por Danya, ya que es una chica fuerte, valiente y que le toca vivir una vida muy difícil. Y de Azlan me gustó cómo poco a poco va abriendo los ojos a la realidad.

¿Lo habéis leído? ¿Qué libro os acompaña este fin de semana? A mí la segunda parte de Asesino de brujas 😊
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Normalmente me suelen gustar los libros que hacen saltos temporales en la trama, pero en este caso está narrado de un modo tan confuso que muchas veces cuesta seguir la trama.

La historia comienza con buen pie, pero desarrollo de la misma se hace pesado y es como si el libro de repente tuviese un ritmo mucho más lento.

El final podría sorprender, pero se hace predecible. No es una lectura que vaya a recomendar.