“La vía del futuro”, Edmundo Paz Soldán. Editorial Páginas de Espuma. 172 páginas. He podido observar entre las diferentes reseñas existentes sobre La vía del futuro (Páginas de Espuma, 2021) una tendencia clara a calificar este libro como un texto de ciencia ficción o de ficción especulativa o sintagmas similares. No obstante, a mi juicio, estas clasificaciones se me antojan inexactas. Lo que plantea Edmundo Paz Soldán (Bolivia, 1967) en este libro, que incluye un total de ocho relatos, es lo que yo denominaría como terror social o terror urbano. Lejos de aquella literatura que parió a los grandes monstruos de la ficción, como Cthulhu o Pennywise, la literatura de las últimas décadas ha apostado por mostrar los terrores que atenazan a nuestra sociedad y, a mi parecer, es en esta tendencia literaria donde podría encajar La vía de futuro. Las cuestiones o los temas que plantea Paz Soldán en los textos relacionadas con ese terror urbano son la crudeza del capitalismo y la explotación laboral, el servilismo hacia la tecnología, la violencia de género, la pérdida de la identidad individual, las dificultades en las relaciones de pareja, la epidemia de las drogas, la violencia que ejerce el sistema académico o la ausencia de una seguridad laboral. Por ello, creo que la utilización de la tecnología o de ambientes distópicos que incluye Paz Soldán en los relatos y que, quizá por ello se le ha dado la concepción de libro de ciencia ficción, no dejan de ser coyunturales o, como mucho, recursos que utiliza para plantear cómo las cuestiones principales de los relatos, que son plenamente contemporáneos, se producirían en un futuro caracterizado por los grandes avances tecnológicos. Y es quizá, en este punto, donde se aprecia el aspecto más pesimista del libro: para Edmundo Paz Soldán, las preocupaciones de los personajes de su libro serán las mismas en el futuro que imagina que las que tenemos nosotros, en tanto que individuos, en la actualidad. Es decir, los grandes terrores seguirán presentes pese al paso de los años: el jefe explotador que, en lugar de ser una persona física, será un holograma; o la violencia de género, que se ejercitará sobre ginoides, por ejemplo. Redactado con una prosa ágil y atrayente, repleta de oralidad, cualquier lector hallará en sus páginas la necesidad de continuar leyendo pese a la crudeza de lo narrado, por lo que se da una combinación muy curiosa entre la lectura adictiva y la incomodidad de las cuestiones que plantea Edmundo Paz Soldán, quien coloca al lector ante las complejas realidades que integran nuestra sociedad. Estoy convencido de que varios de los relatos que constituyen el libro quedarán grabados en la memoria de quienes se acerquen a ellos. Así, Edmundo Paz Soldán ha configurado un libro brillante, lúcido, universal y desesperanzador; una radiografía de la sociedad que sin duda obligará a reflexionar acerca de los modelos que constituyen dicha sociedad y hacia dónde parecen derivar. + Leer más |
Con motivo de la conmemoración del Día Mundial del Libro, el Festival Centroamérica Cuenta rinde homenaje a uno de los grandes poetas de la lengua hispana, Ernesto Cardenal.
Para ello, 19autores de la región hispanoamericana, leyeron fragmentos de los salmos 4, 5 y 9 del libro homónimo, del poeta nicaragüense Ernesto Cardenal (1925-2020).
“Por cuarta ocasión, hemos invitado a autores, poetas y músicos y personalidades destacadas de Iberoamérica para celebrar nuestra literatura y enlazar voces desde distintos países de la región. Este año hacemos también un homenaje al poeta Ernesto Cardenal y su legado”, expresó Sergio Ramírez, presidente del festival y Premio Cervantes 2017.
En orden de aparición, el video incluye al presidente del festival y Premio Cervantes 2017, Sergio Ramírez (Nicaragua), Rebeca Lane (Guatemala), Jorge Volpi (México), Brenda Navarro (México), Niño de Elche (España), Claudia Piñeiro (Argentina), Frank Báez (República Dominicana), Shirley
Campbell-Barr (Costa Rica), Juan Gabriel Vásquez (Colombia), Marta Sánz (España), Abner Benaim (Panamá), Piedad Bonnett (Colombia), Jorge Galán (El Salvador), Elizabeth Duval (España), Edmundo Paz Soldán (Bolivia), Mayra Oyuela (Honduras), Carlos Cortés (Costa Rica), Lina Meruane (Chile) y
Luis García Montero (España).
En estas lecturas colectivas, que el Festival realiza desde 2020, se recuerda a autores de gran importancia para nuestra lengua, siempre en ocasión del Día Mundial del Libro. Su propósito está en línea con uno de los objetivos de Centroamérica Cuenta de tender puentes desde la literatura Iberoamericana, y gracias a esta lectura encadenada, los lectores podrán apreciar y escuchar
distintas voces, acentos de una lengua común.
Esta iniciativa cuenta con el apoyo de la Fundación Ernesto Cardenal y de socios participantes del festival como la Fundación René del Risco Bermúdez, AECID, Unión Europea, Acción Cultural
Española, Instituto Cervantes, Casa América, y CEM UNAM-España.