Vivir es lo mejor es una recopilación de 15 relatos de la admirada (en su época) pero olvidada (hoy en día) Kay Boyle. Su obra, prácticamente descatalogada, es recuperada para nosotras gracias a muñeca infinita editorial. El libro se divide en dos partes con la 2GM como eje divisorio: una primera parte con 9 relatos publicados entre 1931 y 1938, y una segunda con 6 relatos de entre 1941 y 1945. El tema y tono de los relatos de la segunda parte cambian, hasta bruscamente diría, con respecto a la primera. Son más crudos y más desesperanzadores, quizá por eso, personalmente, me han gustado más. Como en toda colección de relatos, hay relatos con los que he resonado más y otros con los que me he quedado más fría. Creo que esto es algo inevitable en toda recopilación de relatos. Unos cuantos relatos sí me han impactado y dejado más huella y por eso me gustaría comentarlos. De la 1a parte: - “ Vivir es lo mejor”. El primero, que da nombre al libro, consigue en poquísimas páginas un in crescendo que no te deja apartar los ojos de las páginas. - “Tu cuerpo es un joyero”. Este relato es muy oscuro, desde inicio a fin. Kay Boyle consigue una atmósfera de desasosiego de forma impecable. - “Los caballos blancos de Viena”. Sobre un médico que llega a los montes para echar una mano al médico local, que se ha roto una pierna. Una historia sobre la llegada del fascismo a Europa. De la 2a parte: - “Los perdidos” tiene como protagonistas a tres chicos que se acercan a un centro de acogida para poder emigrar a USA tras haber luchado en el ejército americano. - “Noche de invierno”, es el relato más triste, y más bonito, sobre los recuerdos y las heridas emocionales de los supervivientes. En resumen, estoy muy agradecida de haber podido conocer a esta escritora gracias a Masa Crítica Babelio. + Leer más |