La tienda de la felicidad

Para lo que los que no sepáis en qué se consiste una novela epistolar, es aquella en la que todo se cuenta mediante cartas, correos, notas... y en esta ocasión vamos a poder disfrutar de una novela muy diferente, divertida y adictiva en forma de correos electrónicos. ⠀
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Tenemos un personaje muy peculiar y divertido que nos va a ir mostrando su vida a través de conversaciones con su madre, su hermano y su sobrino, la vecina, una nueva mujer que ha conocido y las tiendas en las que habitualmente compra o las suscripciones que tiene, lo que me ha parecido un puntazo para conocer más al protagonista. ⠀
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Este hombre tan raro y parlanchin, de los que ya no quedan o eso creo, nos va a hacer reír a carcajadas con su lenguaje y sus ocurrencias, además de hacernos reflexionar también en algunas ocasiones. ⠀
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Con toques que me han recordado mucho a la novela "Contra el viento del norte" he disfrutado de esta historia y me ha mantenido con esa cosilla hasta el final. Sin embargo, justamente el final es lo que me ha fallado. al principio porque no lo entendí. Unos días después porque creo que se me quedó demasiado abierto y me hubiese gustado poder saborearlo más, pero pensándolo bien creo que es un final con bastante sentido y que recupera la chispa de la novela, aunque no me haya terminado de convencer.⠀
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¿Segunda parte a la vista? No lo sé, pero me encantaría😊⠀
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Puntuación: 3,5/5⭐⠀
Enlace: https://instagram.com/funnyr..

La tienda de la felicidad, de Rodrigo Muñoz Avia, es una novela publicada por Alfaguara y que cuenta con 304 páginas.
En esta novela epistolar conocemos a su protagonista, Carmelo Durán, a través de sus correos electrónicos, tanto enviados como recibidos. Gracias a estos emails vamos descubriendo poco a poco la curiosa personalidad de Carmelo, un personaje cuanto menos singular. Aunque la historia se centra en la relación virtual que Carmelo empieza con Mª Carmen, la encargada de atención al cliente de Carrefour, veremos también su relación con su madre, su hermano, su sobrino o la presidenta de su comunidad de vecinos. Los correos de publicidad que recibe el protagonista y su interacción con ellos a lo largo de toda la novela dan un toque muy divertido y ágil a la historia.
No hay mucho más que decir de esta novela. Es una historia sencilla pero entretenida y con unos toques muy divertidos. Recomendada para aquellos que quieran una lectura con un personaje particular y un ritmo ágil.

Maravillosa y divertida novela epistolar a través del correo electrónico de Carmelo Durán, un personaje de lo más excéntrico con el que es imposible no reirte y desde luego, cogerle cariño.
Gracias a un monumental cabreo que pilla cuando su pedido a un conocido hipermercado le llega sin algunos de sus artículos, entabla relación con la responsable de atención al cliente de esta empresa. Mari Carmen, que así se llama, se convierte en una ventana hacia el exterior del ermitaño Carmelo, comenzando una singular relación de amistad.
Paralelamente, iremos conociendo a Carmelo a través de los correos que intercambia con su madre, Aurora, su hermano Elisendo (un reconocido escritor), su sobrino Jacobo, la presidenta de su comunidad de vecinos o el simple correo comercial que le llega a diario.
La tienda de la felicidad (nombre de una de las empresas que bombardea a Carmelo a diario) es una simpática novela que se lee en nada y que resulta muy agradable. Es fácil echarse unas risas con Carmelo y su particular manera de expresarse. Muy recomendable

Me gustan las novelas epistolares. No es que haya leído muchas pero las que recuerdo haber leído (“84, Charing Cross” y dos de Daniel Glattauer me gustaron mucho. Por eso me atrajo este libro que, además, tiene un título tan bonito.

Carmelo Durán apenas sale de casa. Allí tiene todo lo que necesita: un ordenador con conexión a internet. Carmelo escribió un libro, libro que llegó a publicarse y que nadie compró. Su hermano, por el contrario, es un escritor de éxito. Y no será porque Carmelo no sepa escribir: al contrario, escribe muy bien y así nos lo demostrará en los correos electrónicos que intercambia con diferentes personas a lo largo de la novela.

La novela es una sucesión de e-mails: correos que escribe Carmelo y correos que recibe. A lo largo de dos meses: del 13 de marzo de 2019 al 20 de mayo del mismo año. Cada día empieza igual: con un correo recibido de una empresa llamada La tienda de la felicidad: un sex shop que cada día le ofrece un producto que le hará feliz. A partir de ahí, recibe correos de personas conocidas: su madre, su hermano y su sobrino y también desconocidas, sobre todo correos spam. Entre los correos que recibe de personas desconocidas, destaca unos de una persona que llegará a conocer: Mari Carmen. Y es que Carmelo apenas sale de casa y casi toda la compra la hace on-line. Y suele comprar en Carrefour. Pero un día le escriben para decirle que cuatro o cinco de los productos que ha pedido no han podido ser incluidos en su pedido. Carmelo contesta quejándose al departamento de atención al cliente y Mari Carmen, de ese departamento, le contesta. Carmelo contesta a su vez y lo hace con un estilo y con un tono que para la mayoría de las personas hubiese supuesto un punto y final. Pero no para Mari Carmen, que no se queda corta a la hora de escribir y, sin tener una lengua tan afilada como la de Carmelo, no se corta. Y así, a lo tonto, empiezan a escribirse casi todos los días y, sin pretenderlo, se hacen amigos.

La historia es sencilla y del estilo de las novelas epistolares que había leído antes y que os he comentado al principio de la reseña. Lo que la hace diferente es el estilo del autor, Rodrigo Muñoz Avia, y el protagonista Carmelo Durán. Carmelo es probablemente demasiado inteligente para este mundo y, por eso, no acaba de encajar. Si lo conociésemos en el mundo real, probablemente le tildaríamos de raro o asocial. Pero en novela es un auténtico primor. Carmelo es un poco gruñón, lo critica todo, protesta si tiene que hacerlo… Con su familia no es mucho mejor: con su madre se escribe a diario pero no va nunca a verla, tampoco ve a su hermano mayor ni habla con él por teléfono; con el único que parece llevarse mejor es con su sobrino, un adolescente. Yo creo que ninguno de ellos sabe bien cómo tratarle. Pero quién si lo sabe, mira tú por dónde, es una desconocida llamada Mari Carmen. Una mujer que suponemos harta de lidiar con las protestas de los consumidores y que habrá oído/leído de todo. Una mujer que tiene una respuesta para todo pero que, sin embargo, entra al trapo a Carmelo. Y sabe cómo contestarle y, aunque “literariamente” no está a su nivel, consigue establecer con él una relación más íntima que cualquier persona que éste conozca en el mundo no virtual.

A través de los diferentes mails iremos conociendo a Carmelo y su vida. Algo de su pasado, algo de su (no) vida profesional, cosas de su familia, cosas de la comunidad en la que vive (los mails con la presidenta no tienen tampoco desperdicio). En todos ellos derrocha una ironía fina y un humor incisivo que da gusto leer.

Sólo tengo que ponerle un “pero” a este libro: lo poco que me ha durado en las manos. Lo empecé una tarde en plan, voy a ver cómo es este libro, y para la noche del día siguiente ya lo había terminado. Y es que el formato tipo carta le da una agilidad tremenda, las páginas vuelan sin que te des cuenta. Además, es que los correos de unos y otros son un vicio, cada uno en su estilo. Los de Carmelo siempre son maravillosos, inteligentes, sardónicos e incisivos. Los de su madre me han encantado (me han recordado un poco a la Amalia de Alejandro Palomas), la subtrama de la comunidad de propietarios no tiene desperdicio. Y lo mejor, asistir a cómo va evolucionando la relación Carmelo-Mari Carmen.

Es un libro muy divertido que me ha sacado una sonrisa en varias ocasiones. Aunque también es triste en ocasiones pues habla de soledad y pasan algunas cosas que no son precisamente felices. Aún así, en líneas generales, lo definiría como un libro positivo y divertido hecho para el disfrute lector.

Conclusión final

He disfrutado muchísimo con esta peculiar novela escrita a golpe de mails. Una novela con un protagonista fantástico y con un toque de humor irónico que os aseguro que os hará pasar un buen rato.
Enlace: https://librosquehayqueleer-..

Es el libro más divertido que he leído últimamente. En algunos momentos me he reído a carcajadas , todo empieza con Carmelo el protagonista que hace una compra online, en un supermercado, el servicio de atención al cliente se pone en contacto con él para decir que hay una serie de productos que no tienen, Carmelo hace una contestación protestando y ahí empieza todo.
Todo está escrito mediante correos electrónicos, ( forma epistolar moderna).
Libro muy recomendable.

Novela epistolar muy interesante. Carmelo Durán es el protagonista. Un personaje muy curioso y muy bien construido. Es un personaje para recordar. El intercambio de mails con el resto de los personajes monta una historia de lo mas surrealista. Libro muy entretenido y divertido. Totalmente recomendable.