No dejo de pensar en ese endemoniado tiro doble y con una sola mano... ¡Oh! Eso no se hace dos veces.
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No dejo de pensar en ese endemoniado tiro doble y con una sola mano... ¡Oh! Eso no se hace dos veces.
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Ya nadie tiene valor hoy en día, y los jóvenes se preocupan de la sangre de sus padres como si todos fueran bastardos.
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Los ojos de Colomba brillaban con un júbilo maligno que ella no había notado antes. Aquella mujer alta, fanática de sus ideas de honor bárbaro, el orgullo en la frente, la boca fruncida en una sonrisa sardónica ...
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... y se puso a leer, acentuando lo mejor que pudo esos sublimes tercetos que expresan tan bien el peligro de leer entre dos un libro de amor.
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Y el placer de escapar a la persecución, ¿no lo cuenta usted para nada? ¿Cómo puede ser insensible al encanto de la libertad absoluta en un hermoso clima como el nuestro? Con este porta-respeto (mostraba su fusil), uno es rey en todas partes, tam lejos como llegue la bala
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¡Vayan, vayan a llorar como mujeres y agradézcannos que no les pedimos más sangre!
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-Yo soy el amo aquí - añadió con tono severo-, y exijo que me obedezcan. Al primero que se atreva a volver a hablar de matar o quemar; yo lo quemaré a mi vez.
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Dos negaciones equivalen a una afirmación
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¿Cuál de los siguientes libros fue escrito por Gustave Flaubert?