Llegué a este libro por casualidad. Cuando hace años terminé El temor de un hombre sabio me quedé huérfano de fantasía y decidí buscar alguna otra novela que llenara ese agujero, casi sima. Lo que encontré fue esta joyita oculta. Digo “oculta” porque cuando la recomiendo, me suelen mirar con cara de “no sé de lo que me estás hablando”. Ambientada en Camorr (una ciudad que nos recuerda a Venecia) , estos ladrones ponen todo su ingenio al servicio de la historia… ¡Qué grandes son los caballeros bastardos! Todo un descubrimiento. |