Si la poesía no puede cambiar el mundo, es que el mundo ya ha muerto.
|
Si la poesía no puede cambiar el mundo, es que el mundo ya ha muerto.
|
Lo he hecho porque me apetecía. lgual que lo haremos todo siempre en esta casa. Fuera de estas paredes, seremos como nos obligan a ser. Pero dentro no. Eso me lo tienes que jurar.
|
Necesitaban convertirse en personajes para no dejar de ser personas.
|
—¿Eres escritor? —dijo asustada. —¿Y eso? –¿El qué? —Esa cara de pánico... —se rio—. ¿Tanto miedo te daría que yo escribiese? —En este país sí. |
¿Cómo se llama el hermano de Sal Singh?