Dulce perdón

Pedir perdón no siempre resulta fácil. Hacerle ver a alguien la importancia de pedir perdón, y que éste sea real, tampoco.

👴🏻El Sr.Hoi era una persona generosa, muy generosa. Regentaba su propia tienda de bombonería a la que llamó "Dulce perdón".

Todos en el pueblo gustaban de visitar aquel lugar donde siempre les recibía la sonrisa del Sr.Hoi, compraran o no.

🍬 Cada vez que alguien iba allí, el Sr.Hoi le regalaba un caramelo que había patentado con el nombre de Dulce Perdón.

👩🏻Un día, una chica de ojos marrones, acompañada de varios chicos más, se inventó una excusa para entrar en la tienda y llevarse un caramelo.

Otro día, con otra excusa, la escena se repitió. Y mientras la chica hablaba con el Sr.Hoi, los chicos le robaban sus dulces.

🤨Aunque parecía que no, el Sr.Hoi se daba cuenta de todo y esperaba que la chica recapacitara.

✨Tras repetir la escena varias veces más y lejos de instarla a dejar de robar, el Sr.Hoi le animó a coger más caramelos de Dulce Perdón, puesto que parecía que, con ella, no funcionaban. Se supone que los caramelos incitaban a disculparse si el que se los comía había hecho algo mal.

😮La chica de ojos marrones no cogió más, y no volvió más. Ni ella ni los demás.

🤔¿Por qué? ¿Lograrían arrepentirse alguna vez por lo ocurrido? ¿Seguiría Sr.Hoi confiando en todo aquel que entraba en su tienda?

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😍Pedir perdón no siempre resulta fácil. Hacerle ver a alguien la importancia de pedir perdón, y que éste sea real, tampoco. Pero este libro lo hace de una forma magistral.

Desde el #respeto y la #confianza en los demás, desde la posición de un hombre que no tiene prisa y con una gran lección de vida final.

✨Me encanta cuando los lectores descubren la trama y la trampa en la que va cayendo el Sr.Hoi una y otra vez sin ser conscientes de que su fe en los demás le hace actuar de un modo diferente al que a muchos de nosotros se nos habría ocurrido.

Con ilustraciones en tonos azules, esas que dibujan a alguien que cree en la #bondad, esa bondad que a veces brilla por su ausencia.

Edad: +5

Un cuento maravilloso sobre el perdón. Muy sencillo y muy simple.
Pero lo que más me ha gustado más allá de la enseñanza de que el perdón no se ha de pedir sino que ha de salir de uno mismo, son las ilustraciones.
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De verdad, son brutalmente bellas.
La edición está sumamente cuidada y creo que cualquier niño o niña se enamorará nada más verlo.
Cuando lo he visto he disfrutado como una niña, cuidado al detalle todo.
Las palabras elegidas, sencillas para comprensión de los más pequeños, con colores y brillos para hacerlo llamativo a su vista, con los dulces como ¨cebo¨, ¿quién puede resistirse a un dulce?
MARAVILLOSO.
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No hay más qué decir.

Buenas! Hoy os traigo algo totalmente diferente a lo que subo normalmente y es que gracias a #masacritica y @babelioenespanol he podido disfrutar de esta joyita que ha publicado @pijamabooks . Dulce perdón es un cuento entrañable con un bonito mensaje. Tiene una edición y unas ilustraciones preciosas hechas con delicadeza y buen gusto. Puede ser un buen regalo de Navidad. No soy ninguna experta ya que este es el primer libro de este tipo que leo, pero me ha parecido muy chulo. No es necesario tener niños para poder disfrutar de estas lecturas. Y vosotros, ¿leéis cuentos? ¿Os gustan este tipo de libros?

Lo primero destacar la manera en la que he recibido el libro, cada detalle y mimo en su preparación ¡Insuperable!

Es cierto que el libro está dirigido a un público infantil pero tengo que reconocer que me ha enternecido.

¡Qué tierno y dulce!

Libro con un gran mensaje, fácil de leer y fantástico por sus ilustraciones que son de 10.

Me alegra tener este libro en mi biblioteca, se lo leeré a los peques que vayan viniendo 🌹

¡Enhorabuena!

El señor Hoy nació en Tailandia y de joven se trasladó a un pueblo del centro de Europa donde tiene una bombonería llamada Dulce Perdón, así también se llamaban los caramelos que él mismo hacía y que regalaba a todo el que entraba.

El señor Hoy es amable,alegre , confiado y generoso y pensaba que "nadie hacia el mal sin antes haberlo sufrido". Sus clientes adultos pensaba que mimaba mucho a los pequeños a los que regalaba caramelos constantemente y el siempre decía :"No se puede ser feliz con la caja llena pero con el corazón vacío."

El cree que todo el mundo tiene buen corazón aunque una pequeña de ojos marrones le hace pensar durante años hasta que un día recibe una carta ,una carta que le hace muy feliz y que le hace darse cuenta de que nunca es tarde para pedir perdón.

Una edición supercuidada, preciosa con unas ilustraciones espectaculares y un mensaje que todos debíamos recordar y grabarnos . Que necesario es pedir perdón ,no solo para el que lo recibe sino para el que lo pide.


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