La inauguración

Lo bueno que tiene esto de ser un ferviente amante de la literatura es, como he comentado muchas veces en diversas ocasiones a la hora de reseñar algún libro que terminó de leer, que siempre descubro a autores que, a lo mejor, de otro modo no podría conocer.

"La inauguración" es la primera novela de María Inés Krimer que leo. Lo que más me ha gustado de la novela ha sido que al estar escrita por una autora de Argentina y al pasar la mayor parte de la trama en Argentina, ha sido el vocabulario que se suele utilizar en Argentina a la hora de hablar o escribir. Este aspecto siempre me gusta porque es un modo muy útil, desde mi punto de vista, de vivir en carne propia lo que va sucediendo en la novela.

Pero "La inauguración", desde mi punto de vista, tiene una parte negativa que ha hecho que no la haya disfrutado tanto como otras novelas en las que si se puede decir que las he disfrutado. Me estoy refiriendo a la trama, es decir, a lo que se cuenta y la intensidad en la narración. La idea principal de la novela me llama la atención porque es una clara denuncia social en contra de la trata de personas pero la narración, desde mi humilde punto de vista, es demasiado lenta y en ocasiones un tanto aburrida.

Reconozco que "La inauguración" ha sido una de las novelas más flojas que he leído. Ojo, lo vuelvo a decir. Esto es mi opinión personal que puede estar en sintonía con la vuestra o no.

Es el primer libro que leo de una autora argentina, y quizá por eso no me ha acabado de convencer la forma en la que está narrada. Aun así, me ha gustado mucho poder leer libros de diferentes autores, así he podido enriquecerme de otras culturas. La historia nos habla de nuestra protagonista, quien huye de su vida y tiene que enfrentarse a retos que la harán llegar al límite. La verdad es que la trama es buena, pero la forma en que está narrada me ha hecho extrañar más intensidad.
No he podido acabar de disfrutar cien por cien la lectura debido a que no conocía muchas palabras ni expresiones argentinas, y por lo tanto, me perdía un poco leyéndola. Cierto es, que al ser la autora Argentina ha utilizado el lenguaje con el que se sentía más cómoda, así que este aspecto negativo es percepción mía.
He de decir, que la otra protagonista da mucho juego a la novela, ya que es una mujer poderosa físicamente en un mundo de hombres, pero que acaba pronto derrotada… La pelea entre ambas hace que acabes la historia y sigamos reflexionando sobre muchas cosas.

Tiene una narración muy extraña, hecha con frases cortas, lo cual hace que todo sea muy confuso. Muchas veces no lograba entender qué estaba ocurriendo o porqué.

La autora mezcla la acción de la trama (en el caso de haberla) con la imaginación de la protagonista. Además de que el hecho de que use mucho la jerga de habla argentina hace que todo esto para alguien que (como en mi caso) desconoce dicha jerga no sea capaz de entender a qué se refiere y dificulte aún más la comprensión del texto.

Todo esto junto con el hecho de que la trama es muy lenta hace que un libro de tan solo 160 páginas y de capítulos cortos se haga muy pesado de leer.

A mí personalmente no me ha gustado, el tema principal me llamaba mucho la atención, pero no cómo está desarrollado.