El portal de los obeliscos

No eres nada. No, eres la muerte. Y has matado a otra persona a la que querías.

¿Se sentirá mal en caso de hacerle daño por amor? Si le hace mucho daño ahora para que sufra menos a la larga, ¿la convierte eso en una persona horrible? [...] ¿No es ese el verdadero significado del amor?

Sabe que es absurdo. Que el amor no sirve de vacuna contra el asesinato. Pero necesita creer, que en este caso, sí lo es.

Las cosas nunca volverán a ser iguales entre ellos, pero a ella le gustaría que el pasado significase algo.

Los muertos no tienen anhelos

Para aquellos a los que no les queda otra opción que preparar a sus hijos para la batalla

-Lo que piensan los demás no importa. ¿Tú qué crees que eres?
-Humana
-Pues yo también

Todo eso del Padre Tierra no son más que historias para justificar la situación en la que nos encontramos. Como esas sectas extrañas que surgen de vez en cuando. He oído que hay una en la que, antes de ir a dormir, hay que pedirle a un anciano celestial que te proteja. La gente necesita creer que hay más cosas en el mundo de las que son capaces de ver.

No creo que lo que hace tan diferentes a los comepiedras sea el material del que están hechos. Creo que nadie puede vivir tanto tiempo sin convertirse en algo del todo diferente.

cosas tan extrañas y enigmáticas que sus nombres y su propósito original se han perdido hace mucho tiempo. (Recuerda que, fue más o menos entonces cuando aprendió que los propósitos originales se pueden pervertir con facilidad.)