Seremos el huracán

Tan solo intentaré coger tu mano cuando vuelvas a asustarte. ¿Te parece eso bien?

Tener miedo no es algo de lo que avergonzarse. Y es normal que a veces nos paralice. Pero somos mucho más que todo lo que nos asuta, ¿no?

Esta muerto.
Y los cimientos de mi mundo saltaron por los aires.

Me gusta que me perciban como tú, porque me parece la mejor cosa que puedo ser

No voy a excusarme en el dolor: lo hice mal.

Él no me llama Theo, ni Dorothy, ni Dottie. Creo que nunca ha vuelto a nombrarme de ninguna manera, pero no pasa nada, porque a veces a mí también me cuesta encontrar mi nombre. A veces me siento todas esas personas y otras veces ninguna, como si no quedaran identidades para mí.

Para todas las personas que a veces se sienten perdidas: pase lo que pase, encontraréis el camino de vuelta a casa.

«Casa» era una melodía que siempre sonó a Theo, a su guitarra, a su voz. Y sé que él sigue cantando de fondo, que nunca va a dejar de hacerlo, que será siempre un eco o una nota sostenida.
Pero ya no cantamos los dos solos.

—Opino que esta es una parte más de ti. Y a mí me gustan todas.

Creo que todos recordamos el día que brindamos juntos tras nuestra primera actuación en un gran escenario, con esas cinco copas que se han convertido en un ritual porque siempre hay una persona que no está, pero sin la que ninguno de nosotros habríamos llegado aquí hoy tampoco.