La casa alemana

La casa alemana es una novela que te atrapa desde el primer momento. Eva, una joven que deberá enfrentarse a los secretos de su familia. Su personaje irá cambiando psicológicamente a lo largo de la historia. Muy bien representado lo que debieron sentir muchos alemanes al enterarse de lo que sucedía en Auschwitz. Lenguaje fluido y en primera persona. Impactantes testimonios de los supervivientes.
Recomiendo esta obra a aquellas personas que le guste la novela histórica, y a todas aquellas que quieran saber que sucedió en Austchwitz. Y como se sintieron los supervivientes en ese primer juicio en el que era su palabra contra la de sus verdugos.

PERSONAJES

Personajes con una gran carga psicológica. y muy bien dibujados. Solamente he destacados algunos de los más importantes:


Eva: Joven que trabaja como traductora de polaco en el primer juicio de Auschwitz. Ella conocía ese idioma desde pequeña, pero desconocía el motivo. Tras ir escuchando los testimonios de los distintos judíos que estuvieron prisioneros en ese campo de concentración, ella empezará a recordar algunos fragmentos de su infancia y descubrirá que ella también había vivido en el campo de concentración...

Jürgen: Novio de Eva, y magnate del comercio. Muy celoso y autoritario, un personaje acomplejado y con miedos, solamente al final de la novela descubrirá su gran secreto a su padre, y eso hace que su carácter y su forma de ser cambie.

Annegret: Hermana de Eva. No se arrepiente de nada de lo que sucedió en Auschwitz. Es enfermera en la sección de lactantes. Donde los niños fallecen sin un motivo aparente. Solamente al final de la novela descubriremos su gran misterio.

Edith: Madre de Eva, si bien a ella siempre le gusto tocar el violín, nunca lo pudo hacer por tener unos dedos cortos. Será llamada a testificar en el juicio. Y desvelará todo el misterio que girá en torno a su familia.

Ludwig: Padre de Eva, al comienzo de la novela es cocinero de un popular restaurante, si bien su pasado no fue tan tranquilo. Era miembro de las SS, y destinado a Auschwitz para dar de comer a los oficiales del ejercito. En un principio desconocía lo que sucedía allí. Pero no al final. Opto por callar antes de ser destinado al frente.

David Miller: Abogado canadiense y judío. No supera los avatares del juicio y desaparece en una visita a Auschwitz.