Las pupilas no tienen horizontes. |
Las pupilas no tienen horizontes. |
En los ojos se abren infinitos senderos. |
Y tengo la amargura solitaria de no saber mi fin ni mi destino. |
Mis mares interiores se quedaron sin playas. |
Y son las gotas: ojos de infinito que miran al infinito blanco que les sirvió de madre. |
Dime, Señor, ¡Dios mío! ¿No llega el dolor nuestro a tus oídos? |
¿Cuáles fueron las primeras influencias que distinguen la lírica del autor?