—¿Esperas que me crea que no me deseas y que no querías captar mi atención? Admito que eres ingeniosa. Tengo curiosidad. —Serás creído. Pues no. Eres demasiado desvergonzado como para presentarte a mi madre. Pero estoy decidida a vivir nuevas experiencias… —Juro que voy a improvisar sobre la marcha—. Y más ahora que acabo de salir de una relación de cuatro años —me explayo—. Usaré a los tíos igual que hacen ellos con nosotras. |