CIR.—¿Qué más pruebas sino que yo no quiero morir con ella, ni ella gusta de vivir conmigo? JUEZ.—Si eso bastase para descasarse los casados, infinitísimos sacudirían de sus hombros el yugo del matrimonio. |
CIR.—¿Qué más pruebas sino que yo no quiero morir con ella, ni ella gusta de vivir conmigo? JUEZ.—Si eso bastase para descasarse los casados, infinitísimos sacudirían de sus hombros el yugo del matrimonio. |
¿En que año nació Marcel Proust?