Míralo. El rostro de un ángel malicioso y los ojos como el cielo nocturno en el Infierno.
|
Míralo. El rostro de un ángel malicioso y los ojos como el cielo nocturno en el Infierno.
|
A veces, cuando tengo que hacer algo que no quiero, finjo ser el personaje de un libro. Es más fácil actuar como lo harían ellos.
|
La gente guarda secretos, a veces incluso a los que más aman. [...] Y debes admitir que no tiene mucho sentido.
|
Todo el mundo tiene algo sin lo que no puede vivir. Descubriré lo tuyo, no te preocupes.
|
Ella nunca había pensado demasiado en su nombre, pero cuando él lo dijo, fue como si lo oyera por primera vez.
|
Solo los débiles de espíritu se niegan a dejarse influir por la literatura y la poesía.
|
Siempre hay que tener cuidado con los libros, y con lo que contienen, porque las palabras tienen el poder de cambiarnos.
|
Si no le importas a nadie en el mundo, ¿existes realmente?
|
“¿Importan las razones cuando no se puede hacer nada para cambiar las cosas?”
|
“−Y las víctimas –preguntó Will−, ¿de dónde las sacan? −Criminales, sobre todo –contestó Magnus−. Borrachos, drogadictos, prostitutas. Los perdidos y olvidados. Aquellos a los que nadie echa de menos.” |
Manolito ...