La Misión Encélado: Hard Science Fiction

Interesante esta obra de ciencia ficción del subgénero “hard” con evidentes toques que también entraría en el subgénero “especulativo”. Pero en lugar de especular sobre hacia donde irá la humanidad, el autor se centra en el posible futuro de los viajes en el espacio pero de una forma totalmente realista y creíble.

Desde el momento en que una sonda encuentra vida microscópica en Encélado, una de las lunas de Saturno, las diferentes agencias espaciales y operadores privados inician el camino hacia posibles expediciones que acabará fraguando una misión internacional para llegar a la luna helada de Saturno y poder investigar por debajo de su capa de hielo si realmente existe algún tipo de vida y de que tipo es.
Aunque no deja de ser una historia coral de los seis astronautas que componen la misión, el autor utiliza la tercera persona siempre fijándose en uno de los protagonistas que es el que nos irá contando todo a través de lo que va viviendo, así como compartiendo sus pensamientos.
Como en estos tipos de obras de presencia más coral cada personaje tiene un carácter muy definido y diferente a los otros, lo que permite dar juego a la historia, más teniendo en cuenta que gran parte de ella pasará en el pequeño espacio que representan los pocos módulos que componen la nave que los debe llevar a Saturno.
El relato a parte de las relaciones personales de los miembros de la tripulación, tiene un peso muy importante diferentes campos de la ciencia. El autor quiere en todo momento que sea un relato realista, con ciertos avances que todavía no tenemos pero que serían posibles en un futuro para llevar a término este tipo de misión. Y entre toda la ciencia que abunda en el libro, entre cosas conocidas y teorías posibles de lo que podría ser, la inteligencia artificial tiene una peso importante a la hora de ayudar a comandar la nave, y su interacción con los astronautas la convierte en un personaje más. La relación de esta con la tripulación también forma parte de la parte especulativa de la historia y las ideas que planta el autor de que límites puede tener esta por mucho que avance.
Con una narrativa ágil dentro de gran cantidad de ciencia que vamos encontrando, el autor consigue transmitir la sensación de que la historia está pasando en un entorno muy reducido, que cualquier problema se magnifica y puede poner en peligro la misión. Igualmente la recreación de Encélado tiene una gran credibilidad y como lector pareces transportado allí, soportando el durísimo clima como lo hacen los protagonistas.
Una muy buena historia, con unos buenos personajes, y una muy buena documentación que la convierten en una historia del todo creíble, con unos buenos giros argumentales y con un final muy bien conseguido.
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Honestamente este libro al principio me parecía algo lento, incluso algo insulso, pero conforme fui avanzando me ha ido atrapando cada vez más hasta lograr que amara la historia.

Ciencia Ficción pura y dura, de la llamada de primer contacto, si bien es verdad que la historia en si no es realmente nada novedosa, creo que he visto cientos de películas con tramas parecidas, sin embargo es evidente que el autor está muy bien documentado y eso siempre se agradece en este tipo de libros.

No sabía que se trataba de una serie hasta que ya lo había comenzado y solo puedo esperar a que el segundo tomo no tarde mucho en venir.

La narrativa está en tercera persona, pero básicamente centrada en uno de los tripulantes de la nave, Martin, un científico que de astronauta no tiene un pelo pero que por motivos varios termina siendo parte integrante de la tripulación internacional y de este viaje que no solo es peligroso si no además novedoso.

La historia comienza literalmente desde el inicio, los motivos que impulsan a gobiernos y empresas privadas a querer realizar este viaje, la manera en que la sonda espacial funciona, las construcción y pruebas de la nave tuneladora que deberá romper el hielo que cubre Encélado, una de las lunas de saturno y donde se cree que hay vida celular, en fin todos los traspiés no solo del antes del viaje si no también durante el mismo, la llegada a Encélado y la aventura que ahí les espera.

La buena noticia es que este libro no tiene un final abierto, así que a pesar de que sabemos que tiene una continuación, bien podríamos quedarnos solo con este final que para ser honesta no es para nada malo.

Me ha gustado mucho el libro y a pesar de un principio accidentado y algo lento, ha valido la pena su lectura.

No estoy muy segura de que este libro pudiera ser del agrado de todo el mundo, pero si para quienes, como yo, son amantes de la ciencia ficción, esta muy bien escrito, tiene su verdadero punto científico y una aventura realmente interesante, sobre todo cuando la tripulación llega a Encélado.

No conocía a Brandon Q. Morris antes de este libro y el género de la Misión Encélado no es el habitual en mis lecturas, pero me ha sorprendido gratamente y me alegro de que me lo recomendaran.
Los personajes que protagonizan la novela son de lo más variado, y no solo por sus procedencias, sino porque sus personalidades son muy diferentes y, pese a ello, conforman un equipo de lujo para esta misión espacial digna de ser llevada a la pantalla grande. El peso de la historia lo lleva Martin, claro, pero mi personaje favorito es Marchenko, el médico ruso.
La trama me ha parecido original y de lo más entretenida por el toque de intriga que nos presenta el autor.
La Misión Encélado forma parte de una serie y me ha llamado tanto la atención, que la leeré para descubrir cómo termina todo porque me ha dejado intrigadísima y, a pesar de ser ciencia pura, está redactada de tal modo que, incluso, los legos en la materia podemos comprenderla y, de paso, aprender algo del espacio, je, je.