El caballo ciego

Aún pareciendo en un principio una novela costumbrista, esta historia tiene parte de acción, lo cual hace que sea mucho más entretenida.

La novela presenta a una familia en guerra por un caballo: la madre quiere sacrificarlo, ya que se ha quedado ciego y no puede hacer las funciones a las que estaba acostumbrado, mientras que la hija y el padre quieren darle la oportunidad de vivir. Aunque la madre sea cruel, resulta ser también valiente y fuerte, mientras que el padre, aún estando de parte de su hija y del animal, es blando y no vale para nada. Esta mezcla de características hace que en un momento dado sea difícil posicionarse, aunque por supuesto la vida del caballo da peso en la balanza para salvarse.

Parece increíble que esta historia de principios del siglo XX sea tan animalista y con mujeres con las ideas claras como protagonistas. Es muy fácil sentir empatía por todos sus personajes, porque están tan bien trazados que parece reales.

Me ha resultado curioso que en la propia narración, la cual es en primera persona, se cuelen pensamientos de los personajes, estos en primera persona también. La señal para saber si se trata de simple narración o un pensamiento radica en que este último comienza en mayúscula, dando igual que este en medio de una frase de la propia narración. En un primer momento puede sonar extraño, pero realmente resulta muy natural, como si alguien cercano te estuviera contando la historia de memoria y añadiendo los pensamientos que cree que tendrían las personas implicadas en ella.

Un libro recomendable, que parece poca cosa al comenzarlo, pero que a medida que la lectura avanza, va cogiendo un ritmo interesante.

Dos mujeres que se bañan. Una madre y una hija. Así comienza El caballo ciego de Kay Boyle, autora comprometida y luchadora estadounidense[1]. Una imagen banal, pero que consigue transmitirnos toda la fuerza que encierra la novela. Añádase la fantástica traducción de Magdalena Palmer en la incipiente editorial Muñeca Infinita. Habrá que seguir los pasos de Juan Pablo [editor] para ver qué sorpresas nos deparan sus diferentes propuestas narrativas.

«Ahora estoy en casa, este es mi hogar, pero no tengo un sitio aquí porque todos los espacios están ocupados por esa niña que no morirá»

La trama se desarrollará a través de varios planos secuencia. Un triángulo cuyo último vértice es un padre escuálido. La familia, los deseos, el trabajo y las decisiones vitales como argumento. Escritura sencilla sobre distintos niveles que, empero, sostiene una compleja y sutil tela de araña que nos atrapa en el lenguaje. Escuchamos las voces interiores de los tres personajes, sus miedos, sus anhelos e intermitentes sentimientos. Y todo ello pivota sobre la naturaleza y un animal ‘herido', inútil. Un caballo ciego.

«mirando al caballo como haría un curtido gladiador inmovilizado en pleno combate, caído del carro, perplejo y desarmado»«el mozo era un facsímil en miniatura de un hombre duro, indómito y musculoso»

El caballo desencadenará las tensiones existentes en la familia. La fragilidad de unos lazos espurios o inexistentes por la incomprensión mutua. Un padre frustrado, una madre con ansias económicas y de estatus y una hija adolescente con ganas de independencia y libertad. La granja familiar será donde se desarrollen los actos de una lucha entre la belleza de lo inútil y el pragmatismo sacrificial.

«Madre,tú puedes tocar estas cosas, tú puedes tocar la muerte y después limpiártela de las manos con un pañuelo, y tocar el dolor sin arredrarte, pero ya no puedes abrazarme cuando estoy contigo y tengo miedo»

En definitiva, una lectura muy recomendable, con diferentes estructuras narrativas y una historia universal contada de manera indómita, sugestiva y potente. Una lectura que, una vez finalizada, sobrevolará en el recuerdo lector.

— — — — — — — — — — — — — — — — — — — — — — — — — — — —

[1] ]La impronta de la autora (bastante desconocida por estos lares) se entiende por las numerosas veces que es citada en el libro de Dominique de Saint Pern: Black Sun. Cuando editar era una fiesta, Madrid, Fórcola Ediciones, 2021, traducción de Gabriela Torregrosa. En el libro, memorias de Harry y Caresse Crosby se detalla la amistad con editores y escritores de la época, y la represalia que sufrió durante el macartismo.

Enlace: https://papelenblanco.com/es..

El fracasado e inestable Candy Lombe, la decidida y pragmática sra. Lombe y la joven Nancy protagonizan esta encantadora novela corta, la de una familia quebrada por el dolor de un pasado repleto de pérdidas que ha dejado un poso de insatisfacción persistente en el presente. Un presente marcado a fuego por un futuro poco alentador y por un inesperado caballo ciego, que es la fuerza vital de Nancy contra la opinión de todos. La capacidad de sacrificio, de superación, de comprensión y el amor paterno salen finalmente a relucir. Una bonita novela, bien escrita que maneja con audacia el flujo de conciencia y con un final reconfortante. La autora fue definida como "la sucesora de Hemingway". Esta edición cuenta con el apéndice "Topónimos" gracias al que podremos saber algo más de la ajetreada vida de Boyle, una desconocida para el lector medio español.

Es una historia conmovedora, por la fuerza e ignorancia de la juventud luchando contra la terquedad de la madurez. La autora nos presenta una familia atípica para el final de los años 30 en que está inspirada, donde la mujer es quien se encarga de llevar el negocio de la cría de caballos, y el marido, artista sin éxito, se dedica a dejarse llevar por ella, mientras que su hija de diecisiete años empieza a descubrir qué quiere hacer con su vida.

En medio de todo ese vendaval de familia, Candy, el padre, comprará un nuevo caballo de caza para Nancy, la hija; al cual le dará un ataque y se quedará ciego, poniendo en un brete a la unidad familiar ya afectada por las grietas de carácteres tan diferentes entre sí.

Nancy se enfrentará contra todos con tal de mantener vivo al caballo, mientras que su madre estará centrada en todo lo contrario para evitar el gasto de un animal sin beneficios.

Para mí ha sido una historia complicada de leer en cuanto a maquetación, puesto que la autora tiene una manera muy característica de escribir, que quizá se ve agravado por la traducción. No obstante, creo que se han mantenido con muy buen tino las bromas y sonsonetes que canturrea Candy.

En mi opinión, veo reflejada la imagen de Candy en el mismo caballo, de igual manera que, siento personalmente, hace Nancy, de ahí que, por nada en el mundo, quiera deshacerse de él, llegando a rozar la locura en algunas de las prácticas que quiere llevar a cabo con su animal ciego.

He tenido que leerla dos veces para poder sacar un matiz más grueso de pensamiento, porque la primera vez no conseguí quedarme con todo en claro, aun con todo eso, me parece una novela infravalorada, al igual que la autora

La familia Lombe se dedica a la cría de caballos .

La madre, (no sabremos su nombre) es la dueña del dinero y experta criadora y no está de acuerdo con ninguna de las decisiones que toma su marido.

El padre(Candy) es un artista, sensible, que ha fracasado y que convertido en alcohólico derrocha el dinero de su mujer.

La hija (Nancy) , recién llegada de Florencia desea que termine el verano y poder irse de nuevo a vivir su vida. Su padre acaba de regalarle un caballo, Brigand.

El problema es que Candy lo ha comprado sin tener ni idea de caballos y la madre que es la experta cuando descubre que no tiene certificado y que está castrado se opone a mantenerlo. La tensión aumenta cuando se descubre que el caballo es ciego y tanto el veterinario como la madre opinan que es necesario sacrificarlo porque no les sirve para nada.

Nancy quiere salvarlo y para ello lo entrena incansablemente para demostrar que merece una oportunidad.

El padre quiere que su hija cumpla todos sus deseos pero por otro lado tiene miedo de que montar a Brigand suponga una caída y le ocurra algo malo a Nancy.

El enfrentamiento en torno a qué hacer con el caballo no es el único enfrentamiento.

La hija se enfrenta a sí misma y a su madre porque sueña con lograr su independencia pero no quiere enfrentarse abiertamente a ella que quiere que se quede alli y continúe con el negocio.

El padre se enfrenta a si mismo intentando superar su fracaso. Y pretende enfrentarse a la madre, por despecho quizá, poniéndose del lado de la hija.

La madre con una fría, pragmática y autoritaria personalidad dueña de un negocio que produce sus frutos quiere imponer su voluntad. Y se enfrenta a todo y a todos para lograrlo.

Breve, concisa, nada le sobra ni le falta para crear una tensión constante en una, en aparente, sencilla narración pero tremendamente profunda en la que se van mostrando las personalidades de cada personaje y aspectos de su vida pasada que ayudan a entender por qué cada uno es como es y por qué ninguno tiene la razón absoluta.
Lo romántico y lo práctico, el pasado y el presente, los deseos y las obligaciones... Desde luego en pocas páginas da para pensar mucho.
Maravillosa.

Nos encontramos ante un libro de la editorial Muñeca infinita.
Es la primera vez que leo a la autora y ha sido para mí todo un descubrimiento.
Kay Boyle fue una autora especializada en cuentos y relatos.
El caballo ciego es una historia corta que consta de un total de 165 páginas, de rápida lectura. La traducción de Magdalena Palmer me gusta mucho. Y la portada me parece espléndida.
En cuanto a la historia, los personajes me parece que están bien definidos, conectas con la protagonista enseguida.
La narración es muy buena. Nos cuenta la vida de una familia en la que el caballo tendrá un papel crucial.
A los amantes de los animales este libro les puede gustar.
Por otra parte, la prosa y pluma de la autora me han sorprendido para bien. Creo que es un libro que merece la pena leer.
Si nunca habéis leído a la autora lo recomiendo, porque te adentra en el suceso y parece que lo estás viviendo.

Tres personajes y una lucha de poder. Sería injusto reducir a eso esta novela porque, aunque es un breve apunte acertado, hay mucho más en estas páginas.

Estamos en 1938, en la propiedad de una familia acaudalada dedicada a la cría de caballos. Padre, madre e hija viven cada uno absorto en su propia existencia. La madre, que intenta que el negocio y legado familiar no se vea mermado; el padre, que tras abandonar la carrera de pintor y trasladarse a Inglaterra no encuentra su sitio; y Nan, la hija que después de pasar unos meses en el extranjero vive ansiando viajar y alejarse de lo que conoce.

Y, de repente, un caballo ciego que el padre regala a Nan hará que la tensión familiar llegue a la cima. El animal se convierte en el símbolo de sus deseos y sus miedos.
Es a través de esa situación en la que vamos a conocer mejor a unos personajes muy bien perfilados, con sus luces y sombras, y a una parte de la sociedad del momento.

La falta de comunicación entre madre e hija, la vida acomplejada y poco satisfactoria del padre y la tenacidad de Nan junto al ímpetu de su juventud se verán sacudidos hasta llegar a un desenlace que no tiene desperdicio.

Una lectura muy recomendable y que una vez terminada y pasados los días recuerdas con más placer. Cuando me ocurre eso, a mí que tengo mala memoria, me deja muy buen sabor de boca.

Kay Boyle nació en 1902 y, si lo hubiera hecho en el seno de una familia diferente a la suya, lo más probable es que no se le hubiera permitido desarrollar su labor como escritora. O, al menos, no de la misma manera. Pero la madre de Kay, una activista literaria y social que defendía firmemente  la necesidad de que los más favorecidos ayudaran a los menos, siempre creyó en ella.

   La escritura de Kay se ha comparado con la de Virginia Woolf o la de Faulkner. Y no anda muy desencaminada la cosa. al menos en este libro.

  Es impresionante cómo, a partir de un acontecimiento que, por otra parte, debía ser bastante normal en la época y situación que se presenta, desencadena una evolución en los tres personajes principales que te introduce en esa casa de una manera hasta participativa. Te pones del lado de unos, aborreces a otros. Cambias de opinión constantemente y te preguntas si el tratamiento exhaustivo que se hace de la psicología de esta familia no deja en evidencia lo que hasta ahora eran tus creencias.

   No hay duda de que la madre de Kay fue una gran influencia para ella y queda reflejado en este libro de la manera más sencilla y, a la vez, más complicada. El deber contra la justicia; lo establecido contra la rebeldía. Un caballo ciego que llega para darle la vuelta a todo.

Es una novela corta verdaderamente extraordinaria. Breve, profunda, con unos personajes muy bien trazados y un gran dilema moral.

Retrata a una familia en 1938 y todo gira en torno a Nan. Una joven a quien su padre le regala un caballo que se queda repentinamente ciego cuando sufre una isquemia. Y ahí comenzará una lucha familiar y una gran tensión entre ellos. Saliends a la luz sus conflictos internos. Con sus luces y sus sombras.

La Familia Lombe es una familia que se dedica a la cría de caballos.
La madre, una mujer autoritaria que toma las decisiones importantes y de quien es el negocio. Está casada con Candy, quien entre Lienzos en blanco bocetos, pinceles limpios, caballeros y óleos comparte su frustración de artista fracasado ahogando las penas en alcohol y derrochando el dinero de su mujer actuando por despecho.

La hija, una joven que acaba de salir de un internado en Florencia y que está buscando encontrarse a si misma y su independencia. Se revelará contra todos por el amor a su caballo creando con el un vínculo muy cercano y especial.

Con una prosa delicada y precisa y una narración elegante y exquisita, además de muy descriptiva, tratará temas como la impotencia, el miedo o la intolerancia.
Seremos partícipes de una lección de superación, lucha y constancia.

La autora (hasta ahora desconocida para mi) ha sido comparada por su elaborada prosa a Virginia Woolf, James Joyce y William Faulkner.
Fue novelista, poeta, educadora y activista política. Publicó más de cuarenta libros, entre ellos, novelas, volúmenes de poesía, relatos y libros infantiles. Y se encuentra entre las mejores autoras estadounidenses de relatos de su siglo. Agradezco a la editorial que nos rescate obras tan espectaculares y autoras que por desgracia están en el olvido