Los libros de vidas de otras personas me suelen llamar la atención, y el género gráfico me chifla, así que decidí pedir prestadas estas memorias gráficas en la biblioteca. Lo malo es que no conocía a la autora, así que no tenía idea de cómo iba a ser la lectura, pero un vistazo rápido de algunas páginas me dio buena espina. Me ha resultado curioso leer un diario gráfico en el que la autora va exponiendo todo lo que le pasa a diario pero en cómic en vez de escribiéndolo como suele suceder. El resultado es diferente y ameno, aunque a mi parecer tampoco es nada del otro mundo. No pienso que esta lectura me haya aportado demasiado más allá de la experiencia de leer un diario en cómic. Los sucesos que le ocurren a la autora son superfluos y faltos de interés. Que si sube unas cajas a su casa porque de muda, que si se pone en la calle a vender sus cómics y tiras y no va nadie a comprarlas… No sé, aunque me ha parecido entretenido por su formato diferente, he de reconocer que no siento que vaya a recordar este libro más allá del tiempo. En alguna ocasión sí que ha expuesto un poco sus sentimientos con respecto a la frustración dea escritora por no ser lo suficientemente buena, según su opinión, pero me ha parecido que en esas ocasiones podía haber sacado más jugo a sus pensamientos. El dibujo de Gabrielle Bell es sencillo pero contundente, sin detalles nimios que no vengan al caso , de esos que tienen una falta de interés para lo que se está narrando en ese momento. El estilo del dibujo de la autora es lo que más me ha gustado del libro, ya que soy dada al minimalismo en este género, y no suelo ver con buenos ojos el exceso sin fundamento. Espero dar con otro cómic de la autora que me aporte más y que cuente una historia algo más interesante, porque como digo, su estilo me ha gustado mucho. + Leer más |