El maravilloso Mago de Oz

—¿Y mi valor? —intervino el León en tono ansioso.
—Estoy seguro de que te sobra valor —respondió Oz—. Lo único que necesitas es tener confianza en ti mismo. No hay ser viviente que no sienta miedo cuando se enfrenta al peligro. El verdadero valor reside en enfrentarse al peligro aun cuando uno está asustado, y esa clase de valor la tienes de sobra.

Dorothy vivía en medio de las extensas praderas de Kansas, con su tío Henry, que era granjero, y su tía Em, la esposa de éste.

Si tuvieras cerebro serías tan hombre como cualquiera de ellos. El cerebro es lo único que vale la pena tener en este mundo, sea uno cuervo u hombre

Si caminamos lo suficiente, alguna vez llegaremos a alguna parte.

El verdadero valor consiste precisamente en enfrentarte con el peligro pese a tu miedo, y creo que esa clase de valor la posees de sobra.

En los países civilizados ya no quedan brujas, ni brujos, ni hechiceras, ni magos. Pero la tierra de Oz nunca ha sido civilizada, pues estamos apartados del resto del mundo; por tanto, entre nosotros siguen existiendo magos y brujas.