Una novela mágica, una fábula exquisita en la que refleja a la perfección la Armenia donde ella misma, la escritora Nariné Abgarian, crecerá. Y nos mostrará un paisaje en peligro de extinción. Una conmovedora obra donde los habitantes del pueblo llamado Marán, perdido en un rincón del Cáucaso, se hacen presentes y con ellos, así también con las excelentes descripciones de su paisaje y su forma de vivir, iremos de la mano atravesando esta cautivadora historia. En ella nos acercamos a un mundo sereno, a pesar de sus desgracias, a un mundo en el que descubriremos su gran energía para revelarnos y explorar la vida, la muerte, el amor, la belleza, lo sobrenatural, la magia y las relaciones entre los vecinos y protagonistas que nos acompañarán, permitiéndonos vivir y soñar cada pequeño detalle hasta alcanzar la cima de la amistad verdadera. Y es que en Marán, vamos a conocer a sus habitantes, toda su vida así como sus maldiciones y los milagros que siempre los rodean y además son tomados muy en serio, porque reflejan su mundo, forman parte de sus vidas, así como también la verdadera amistad y el amor que desprenden. Es una obra donde la resistencia de un pueblo unido ante las desgracias, marca la enorme diferencia y la distancia del mundo que conocemos, y esto lo hace mucho más atractivo. Tiene el poder de recordarnos a los que ya no están presentes , las historias de aquellos que desaparecieron, pero que ejercen su influencia, la poderosa memoria con la que se convive en este enigmático pueblo nos acerca más a ellos y nos invita a querer saber, a conocer, a disfrutar de todos y cada uno de los personajes, de los paisajes , de la forma de vida, de las comidas y de los ritos que no cesan. Qué maravilla ha sido dejarme atrapar por todo ello. En esta obra reside la belleza narrada en los pequeños y fantásticos detalles que nos envuelven en cada línea, en cada paso, en cada suceso, en cada historia, en cada sueño. No hay mejor manera de perderte entre sus palabras y poder disfrutarlas. Una obra que, dividida en tres partes y un capítulo final absorbente , consigue que no sólo seamos observadores de todo lo que nos relata sino que comprendamos el significado de lo ocurrido. Título y estructura nos invitan y nos adelantan esa atmósfera tan especial en la que nos sumergiremos con presteza. Las partes son tituladas del siguiente modo: Primera parte: Para quien vio. Segunda parte: Para quien contó. Tercera parte: para quien escuchó. Y así ha sido, primero hemos visto, hemos observado, después nos han contado y nos ha captado y por último lo hemos escuchado atentamente y hemos empatizado y comprendido. Sobre el título, que es precioso y evocador, lo encontramos al final donde persiste la felicidad, la amistad y el amor. Y en él también hay magia , porque en estas tres manzanas reside su magia, además de ser el nexo que une a cada uno de los personajes: “Tres manzanas que caerán del cielo a la tierra , tal como dicen las leyendas de Marán: una para quien lo ha de ver, otra para que lo ha de contar y la tercera para quien lo va a escuchar y va creer en el bien. Ha sido un verdadero placer leer y conocer a todos y cada uno de sus personajes. Anatolia Sevoiants, con la que se inicia la historia, es uno de ellos con la que viviremos su infancia, que no fue nada feliz, pasaremos por su juventud, igualmente desdichada , un matrimonio infernal, hasta que encuentra su momento de bienestar y es feliz trabajando en la biblioteca municipal, y es una mujer culta y querida por sus vecinos aunque también sabremos de su soledad y sus sufrimientos. Conoceremos además a Vasili Kudamants , el herrero del pueblo un personaje que nos aporta firmeza pero también mucha soledad, un hombre que tampoco ha sido feliz, su mujer Magtakhiné no estaba bien y su matrimonio fue un desastre hasta que la muerte de su esposa, lo dejó en total soledad. Un hombre que ha tenido muchos problemas severos y ya en su madurez pretende encontrar la tranquilidad merecida. Y ambos, Anatolia y Vasili, aunque muy diferentes podrán darse la oportunidad de vivir un mundo más feliz ¿ Lo conseguirán? Y aquí comenzará otra de las historias más extraordinarias de la novela. Y otros personajes también nos acompañarán , como Hovhannés Xalvarants y su esposa Iassaman Xlapkants, una pareja bien avenida que no dudará jamás en ayudar a los demás. Pero es que todos se apoyan , todos se ayudan, todos se unen tanto en los malos, como en los buenos momentos que les ha tocado vivir. Y así empatizamos con cada uno de los personajes que aparecen en la historia. Las experiencias son compartidas generosamente, y con ellas, también nosotros podemos acercarnos a las costumbres y a las tradiciones armenias que aquí se nos transmiten de forma excepcional y llenas de lirismo. Todo el libro está impregnado de lo sobrenatural, de la magia, de los sueños y de lo extraordinario que pueden llegar a ser los habitantes de este pueblo, de Marán, en el que siempre respiramos y saboreamos todos los manjares que nos ofrecen. También hay plagas, muertes, pobreza, superstición y remedios ancestrales, aunque siempre impregnados de sensibilidad y emoción. Y si hablamos del estilo, pues sólo puedo decir que es muy preciso, también ágil a pesar de lo descriptivo, y tiene un ritmo que nos atrapa con interesantísimas reflexiones. A mí me ha gustado mucho, lo he disfrutado y también he soñado. + Leer más |