Una excelente lectura de la primera novela de Bibiana Collado, ya que en el ámbito poético ya goza de un gran y merecido reconocimiento. La autora es compañera y amiga de muchos amigos míos, es decir, tenemos conocidos y amistades en común, además de muchas otros aspectos, en el terreno profesional en el que coincidimos y estoy convencida que cuando nos veamos, hablaremos. Y la verdad es que esta novela, Yeguas exhaustas, me ha provocado una enorme satisfacción, ha sido un placer leerla, es absolutamente genial y debo darle la enhorabuena. Y si hablamos del título, pues es un gran acierto porque refleja perfectamente, lo que se expone en la obra, en ella las mujeres están cansadas, cargan con el peso del trabajo y de lo que les tolera la vida que tienen que aguantar, y siempre con resignación, son, por tanto, yeguas exhaustas, están físicamente extenuadas. Y además del título y de una portada espectacular, también la edición es una maravilla, porque además de introducirnos alguna fotografía relacionada siempre con lo que se narra, y estar separada en capítulos, con títulos sugerentes, posee páginas en un color más oscuro que denomina incisos, son cuatro y el Remate final, en ellos se aclaran aspectos relevantes de su realidad y situación, en forma de diálogos extraordinarios y breves. Un contenido realista y honesto con el que nos hace absolutamente cómplices, muy bien contado, donde nos transmite experiencias y reflexión, además de ser, visualmente, un libro maravilloso, atractivo y con poder. Lo tenemos todo. Vamos a conocer a la protagonista. Será a través del personaje de Beatriz, la protagonista , como nos narra en primera persona y muy cercana al lector, su vida, una vida en la que siente que no se han cumplido sus expectativas. Pues su vida está vinculada a una familia trabajadora que llegó de Almería a la Comunidad Valenciana, donde han tenido que luchar por una integración que parece no estar nunca plenamente conseguida. Todo ello , junto a sus implicaciones por las desigualdades de clase social y sus relaciones personales, son heridas que arrastrará durante mucho tiempo, ya que Beatriz está absolutamente imbuida y muy afectada por una relación amorosa, complicada, tormentosa y negativa, en la que fue ninguneada y despreciada. Serán aspectos importantes que la convertirán en una mujer insegura a pesar de su licenciatura, sus excelentes notas, del máster y de trabajar como profesora. Sin embargo, ella no se siente nunca lo suficientemente válida. Una obra que cobra interés en cada línea que lees ya que con absoluta franqueza lo que hace es dialogar con el lector al que le confía sus sentidas vivencias que marcan el paso del siglo XX al siglo XXI en España. Y todo ello, tan bien contado a través de su propia experiencia que, lo que realizamos junto a ella, es un perfecto viaje de introspección en la que quedan muy bien reflejados todos los sentimientos que provocan en una vida, la vulnerabilidad, la valentía, el sufrimiento y la capacidad de trabajo en las mujeres. Son sentimientos tan reales que sorprenden a la vez que, nos detenemos para pensar, explorar y cuestionarnos con ella todo lo que nos aporta en este ejercicio de memoria que llega a ser de ella y también de todos. Elementos identificativos y reales de una etapa que también he conocido, y que me parece estar viviendo junto a ella El pasado no es exactamente un álbum de fotos, el pasado no consiste en abrir ese álbum, ir pasando las páginas y ver fotos fijas, inmóviles y paradas en un espacio, en un tiempo y en un lugar. El pasado es mucho más, el pasado tiene articulaciones , se mueve, recorre las calles por las que anduvimos, se centra en las personas que conocimos, dibuja en las paredes encaladas corazones atravesados por una flecha sangrante, cuando supimos enamorarnos. El recuerdo ocupa la cabeza , el corazón y toda la amplitud de la sentimentalidad y se mueve, nos acompaña trasteando con nosotros, acompañándonos ante la demanda de cualquier visión, cualquier olor, cualquier sabor, una canción, una palabra, un paisaje, cualquier situación con remitente, llevándonos al camino donde comienzan los recuerdos. Leer este libro es acercase a conocer de un modo extraordinario, una realidad que nos va a emocionar. Buena historia, muy bien escrita con un potente argumentario y con una calificación de excelente. + Leer más |