En un gobierno totalitario envuelto constantemente en guerras, un partido que lo sabe todo, un pasado inexistente, un patriotismo excesivo, una población controlada, unas vidas sin intimidad, una sociedad sumida en la ignorancia, un mundo lleno de escasez pero sobre todo adoración al gran hermano y odio al enemigo. Estas serian las frases con las que describiría a esta novela. Un hombre que lleva toda su vida trabajando para el partido, otro mas sumido al trabajo, siempre vigilando, pero sabe que siempre hubo un pasado y este cambia constantemente dia tras dia, siendo modificado y borrado en conveniencia de ellos. Winston en el fondo odia la vida que le han hecho tener, le encantaría cambiarla y conocer a alguien que tenga su misma opinión, sabe que con sus inquietudes lo único que va a poder conseguir es acortar su tiempo de vida, acercándose constantemente a la tumba, solo para acabar vaporizado y nunca haber dejado una huella en el mundo, con la idea que ellos quieren que tenga, una loca adoración al gran hermano. Al principio la novela se me hacía un poco aburrida era la vida de un trabajador cansado de su rutina, pero cuando vas destripando su historia y profundizando en ella, te puedes dar cuenta de la complicidad de esta. Todo es un guiño a los comienzos de las revoluciones socialistas y sus potencias principales, donde se nos presenta una distopía en la cual, como excusa del beneficio de unos cuantos, y su temor a la perdida del poder. Quieren vivir en un mundo sumido en las guerras, donde se destaca la escasez y patriotismo de su población. Se puede decir, que la novela se mueve entorno al pensamiento, el control de la mente de las personas y como de esta manera, pueden permanecer en el poder sin ser restituidos por otros. "Sin la conciencia de otra posibilidad, el único remedio que queda es la adaptación". La profundidad de este libro es fascinante y claramente por sus últimos capítulos, se nota como de verdad es una historia trabajada, se puede ver la metamorfosis del protagonista antes considerado como un enfermo, hasta que al final "es curado". Algo que me llama mucho la atención es su final, no es uno bueno para el protagonista, pero tampoco tan horrible, simplemente es realista e inesperado, siento que si estuviera en una situación parecida, lo mas posible es que acabase igual que todos lo que han pensado como Winston. El libro te hace entender que el protagonista en realidad es insignificante. En toda su vida no ha hecho nada para la humanidad y si ellos se lo propusieran, podrían borrar su minúscula huella en el mundo. De forma irremediable, Hay una frase que dice O,Briel, que define esto perfectamente. "¿No comprendes, Winston, que el individuo es sólo una célula? El cansancio de la célula supone el vigor del organismo. ¿Acaso te mueres al cortarte las uñas?" Tan cotidiana pero extravagante frase, me ha hecho pensar, diría que por su final es un libro impresionante, en mi opinión supera mil veces a rebelión en la granja. Y por tanto es una lectura que recomiendo bastante, un clásico perfecto si quieres reflexionar. (Es irónico sentirse reflejada con esta novela, me siento como si el libro contase algo que ya se y aun asín me supera mil veces sus conocimientos, me siento abstraída con cada parrafo no puedo seguir leyendo. Esq siento todo tan real, refleja tan bien a la vida misma. La verdad es que ahora mismo me siento como Winston. Nada más que otro ser, que nace, se reproduce y muere. Su unica finalidad es perpetuar un ciclo que busca aguantar lo mas posible, una anomalía del universo que se niega a extinguirse y por tanto allí sigue.) + Leer más |