Forjada en la tormenta de David B. Gil
Entregarse a la batalla con la intención de sobrevivir solo conduce a la muerte
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Entregarse a la batalla con la intención de sobrevivir solo conduce a la muerte
|
Ocho millones de dioses de David B. Gil
Dicen que la verdadera amistad es una flor al viento: llega de forma inesperada y de igual forma debe dejarse marchar.
|
Ocho millones de dioses de David B. Gil
Solo un necio discute con quien se halla enajenado por las circunstancias.
|
Ocho millones de dioses de David B. Gil
Es imposible derrotar a tu enemigo si no has quebrado antes su ánimo.
|
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Quizás la maldición de las mujeres Kuroda sea sobrevivir a sus hombres, y nuestro sino, demostrar que podemos hacernos cargo de aquello que dejan atrás. |
Forjada en la tormenta de David B. Gil
¿Cuántas decisiones tomamos creyendo nuestras, cuando en realidad solo buscamos la aceptación de nuestros padres?
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
La vida era injusta para todos, aunque para unos más que para otros.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
—¿Nunca ha escuchado que el mejor cazador no es el mejor arquero, sino el más paciente?
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Las viscitudes y las privaciones no son un martillo que haga saltar las impurezas; son, más bien, como el temporal que azota un árbol solitario y revela su verdadera naturaleza: si este es fuerte y sabe adaptarse, resistirá; si es frágil, se quebrará. Pero de ningún modo fortalecerá sus raíces. No hay más fortalezas o debilidades que las que ya germinan en nuestro interior, y las arrastramos dondequiera que vayamos.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
-No puedes obligarte a sentir algo que no sientes. Mi esposa y yo lo hemos comprendido con el paso del tiempo. Cuando lo asumes, puedes aprender a vivir la vida que te ha tocado... O puedes buscar tu propio camino al margen del mundo.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Ser sabio no consistía tanto en discernir las decisiones correctas de las incorrectas, como en asumir con serenidad las consecuencias de cada una.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Contra la mentira que uno mismo se cuenta hay poco que hacer, ni la verdad más evidente es capaz de rebatirla.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
—Las mujeres siempre desaparecen, niña. Se las llevan los soldados, mueren al parir un hijo, o mueren de hambre con tal de alimentarlo.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Hasta la fecha no he encontrado crimen que no explicara la lujuria, la envidia o cualquier otra de las bajas pasiones humanas. Si los seres del inframundo verdaderamente cruzan a este lado, sin duda rehúyen a las personas.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Nunca se está más cerca de la derrota que cuando se tiene la victoria al alcance de la mano.
|
Ocho millones de dioses de David B. Gil
La individualidad es una ilusión del ego que solo persiste durante nuestro tránsito por este mundo.
|
Forjada en la tormenta de David B. Gil
Su padre solía decir que un sable revelaba mucho del samurái que lo empuñaba.
|
El guerrero a la sombra del cerezo de David B. Gil
Los hombres débiles tienen sueños; los fuertes, voluntad
|
Ocho millones de dioses de David B. Gil
La voluntad del espíritu puede doblegar incluso a la decadencia de la carne.
|
¿Con qué frase empieza esta novela?