Carla Marpe

—Debería ser obligatorio invertir el tiempo solo en aquello que sentimos que merece la pena.

-¿Te molesta?
-¿Qué es?
-Una pluma.
-¿Para qué?
-Para tocarte con delicadeza. Si te sigo tocando directamente, no sé si podría proporcionártela.

“¿Cómo puedes pensar que eres débil? Si le has echado un pulso a cada piedra del camino y has conseguido levantarlas para poder pasar

-Sofía, tengo que colgar... Buenas noches.
-Recuerda que todos cometemos errores, esa es la causa de que existan las gomas de borrar.

-La experiencia es algo tan importante...
-Pero adquirirla no es fácil, hay que tener la oportunidad para empezar.
-Cualquier momento es una buena oportunidad de construir un nuevo inicio.
-Eso dependerá de qué es lo que se quiera iniciar y de si vale la pena dedicarle tiempo.
-Debería ser obligatorio invertir el tiempo solo en aquello que sentimos que merece la pena.
-No todos somos dueños del nuestro.
-Si no creemos que algo nos puede pertenecer, nunca lo hará.

-¿Hemos vuelto a tutearnos?
-Sabes... No es que dejase de tutearte, es que me puse a la misma distancia que tú. Y eso es demasiado lejos, ¿no crees?

-Es sobre el futuro, Otón. Y tú ya sabes que el futuro es taaan complejo...
El futuro: ese gran desconocido.

-A veces, los desconocidos son quienes nos inspiran más confianza. Les podemos explicar cosas que a nuestros conocidos jamás nos atreveríamos a contar.
-Eso es cierto.
-¿Y sabes por qué pasa eso, Irene? porque las personas que nos conocen se creen con la capacidad de juzgarnos al saber de nuestro pasado. Sin embargo, una persona que no sabe nada de ti, solo dispone de tu presente, no hay más que lo que tiene delante.

-En la vida no te tienes que preguntar qué puede salir mal. Sino que pasará si lo intentas.

Deberia ser obligatorio invertir el tiempo solo en aquello que sentimos que merece la pena

Es una pena que no siempre nos demos cuenta de todo lo que somos capaces de hacer hasta que lo convertimos en posible

Por mucho que la oscuridad lo enturbie, siempre habrá una pequeña grieta por la que se cuele la luz.

ni confirmo ni desmiento

Quizá sea en los momentos de frustración e impotencia cuando nos aferramos a un clavo ardiendo, sin preocuparnos por las cicatrices que puedan dejarnos las quemaduras en la piel.

Nadie piensa en las secretarias. Somos las eternas olvidadas. Como esa maceta de la oficina que nadie se acuerda de regar, pero que a todo el mundo le gusta tener cerca porque aporta paz y tranquilidad.

—Porque las personas que nos conocen se creen con la capacidad de juzgarnos al saber de nuestro pasado. Sin embargo, una persona que no sabe nada de ti, solo dispone de tu presente; no hay más que lo que tiene delante.

—A veces, los desconocidos son quienes nos inspiran más confianza. Les podemos explicar cosas que a nuestros conocidos jamás nos atreveríamos a contar.

El tiempo pasa demasiado rápido y los momentos se pierden por el camino si no los disfrutamos.

Por desgracia, las personas importantes también nos abandonan en contra de su voluntad y no hay nada que podamos hacer, salvo mantenernos fuertes con todas las lecciones que nos enseñaron.

—En la vida no te tienes que preguntar qué puede salir mal. Sino qué pasará si lo intentas.